Más de 212.000 familias han pedido ya el ingreso mínimo vital

G. Lemos LA VOZ

ECONOMÍA

M.MORALEJO

La mayoría de las solicitudes corresponden a personas de más de 40 años que viven solas

18 jun 2020 . Actualizado a las 19:42 h.

Una persona de más de 40 años que vive sola. Es el perfil mayoritario de los solicitantes del ingreso mínimo vital (IMV) en los primeros días de tramitación de la prestación, en los que se ha producido un bum de solicitudes a través de la web de la Seguridad Social, con más de 212.000 peticiones completadas en solo tres días, según la cifra que avanzó este jueves el ministro de Inclusión y Seguridad Social, José Luis Escrivá. En su comparecencia en el Senado, el ministro informó de que en todas ellas se ha procesado correctamente la documentación, aunque ahora habrá que comprobar que está completa y que se cumplen las condiciones requeridas para poder percibir la ayuda.

De las solicitudes recibidas hasta el momento, prácticamente la mitad (49,5 %) corresponden a personas que viven solas, y otro 7 % a hogares formados solo por adultos. En cuanto a las familias con niños, la mayoría de los que tramitan el ingreso mínimo son monoparentales (un 36 % del total de peticiones). Por tramos de edad del titular de la ayuda, más del 54 % son mayores de 40 años y otro 43 % se sitúa en la franja de edad entre 24 y 39 años.

Escrivá detalló que, a falta de que se tramiten esas peticiones (que si son aceptadas se abonarán con carácter retroactivo desde el pasado 1 de junio), el viernes de la semana que viene se pagará ya la primera nómina del ingreso mínimo, que llegará a aquellas familias a las que se les reconocerá de oficio la prestación por estar percibiendo ya una ayuda de la Seguridad Social por hijo a cargo. En total, recibirán esa primera nómina 76.000 hogares, a los que se inyectarán 32 millones.

Ineficaz gestión autonómica

Cuestionado por la senadora asturiana del PP Mercedes Fernández, Escrivá defendió la necesidad de crear un ingreso mínimo estatal por las acusadas diferencias entre comunidades. Puso para ello el ejemplo de Asturias y Galicia, recordando que el Principado, con solo un millón de habitantes, destina 130 millones al año en su salario social, que llega a más de 22.000 familias, mientras que en Galicia, con casi el triple de población, la dotación de la risga y el número de beneficiarios es la mitad. «Dependiendo de la orientación de las políticas sociales de las comunidades, algo que está destinado a reducir desigualdades, las amplifica», subrayó.

Además, el ministro rechazó la cesión de la gestión del IMV a las autonomías de régimen común destacando que la Seguridad Social es más eficiente en la tramitación de prestaciones, ya que solo tarda 13 días en reconocer las pensiones contributivas frente a los 130 días de media que, dijo, les lleva a las regiones con las no contributivas, que en algunas llegan a 400: «Cuando uno pone el dinero, tiene que exigir eficiencia».