CSIF presenta una denuncia por las amenazas a los funcionarios del SEPE por el retraso de los ERTE

LA VOZ MADRID

ECONOMÍA

Rodrigo Jiménez | EFE

Mensajes en redes sociales como «espero que a alguien se le vaya la pinza y empiece a pegar tiros», les hacen temer por la seguridad de la plantilla a partir del lunes, cuando las oficinas reanuden la atención al público

12 jun 2020 . Actualizado a las 14:14 h.

La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha presentado este viernes en los juzgados madrileños de Plaza de Castilla una denuncia penal para que se investiguen las «amenazas físicas y coacciones» que la plantilla del SEPE está recibiendo, a través de redes sociales, por el retraso en el pago de los ERTE, que afecta -según el sindicato- a unos 200.000 expedientes.

«Cuando abráis las oficinas os vamos a pegar fuego», «os vais a arrepentir de estos tres meses dejando sin cobrar a tantas personas», «espero que a alguien se le vaya la pinza y empiece a pegar tiros…», son algunos de los mensajes recibidos a través de Twitter y que les hacen temer por la seguridad de los trabajadores, habida cuenta de que la atención presencial en las oficinas del servicio de empleo se reanudará el próximo lunes en los territorios en fase 3.

El representante de CSIF en el SEPE, Manuel Galdeano, ha sido el encargado de poner en conocimiento de la justicia los datos de los usuarios para que se investiguen e identifique a los autores, ya que los mensajes recibidos pueden ser -según la organización- constitutivos de los delitos de amenazas, coacciones e injurias. El sindicato ha reiterado, además de su preocupación por la inminente apertura al público de las oficinas del SEPE, su rechazo a la misma. «En primer lugar, porque todavía hay cerca de 200.000 expedientes de ERTE sin resolver (y por tanto personas inmersas en estos procedimientos sin cobrar) además de otro número significativo de desempleados pendientes del abono de otras prestaciones extraordinarias de protección por desempleo aún sin cuantificar, a diferencia de lo que se traslada por parte de la Ministra de Trabajo en el sentido de que ya se ha acometido el 98,5% de las cargas de trabajo», insisten.

Rechazo a la apertura presencial

El sindicato sostiene que, para realizar la reapertura «con las debidas garantías» de seguridad, antes debería «estabilizarse» esa carga de trabajo, porque «es más que previsible que la angustia e incertidumbre de estas personas se trasladará a las oficinas del SEPE y a los profesionales que las atienden». Igualmente llevan semanas reclamando, además de las máximas medidas de seguridad sanitaria para trabajadores y usuarios de las instalaciones -que comparen con las comunidades autónomas- también la presencia de cuerpos y fuerzas de seguridad, «que garanticen la invulnerabilidad tanto de gestores como de usuarios».

«Poco sentido tiene reanudar la atención presencial -en unos territorios sí y en otros no-, si no podemos estar en condiciones de garantizar una respuesta efectiva al conjunto de desempleados a los que, lamentablemente, todavía no hemos podido llegar», subrayan, recordando que desde el comienzo de la pandemia, la plantilla del SEPE trabaja siete días a la semana y a doble turno, durante el confinamiento, desde sus domicilios, «para resolver la avalancha de solicitudes de protección por desempleo, con una plantilla deficitaria». Según apunta CSIF, respecto al año pasado la carga de trabajo se ha incrementado un 530 %, mientras que la plantilla solo ha aumentado un 10 %, con personal interino por seis meses, prorrogable a nueve.