Retraso en las nóminas de 600 operarios de las plantas de Avilés y A Coruña vendidas por Alcoa

F. F. LA VOZ

ECONOMÍA

Marcos Míguez

La multinacional da unos días más a Parter para que o rompa con Riesgo o lo obligue a cumplir los requisitos de la venta

30 may 2020 . Actualizado a las 09:58 h.

La venta de las fábricas de Alcoa en A Coruña y Avilés el 31 de julio pasado al fondo suizo Parter fue la alternativa al cierre y los despidos. Todo un triunfo. Pues, además, el comprador se comprometió a aplicar un plan industrial y a preservar los 600 empleos durante al menos dos años. Pero esa operación se ha convertido en una pesadilla, sobre todo para los trabajadores, pues Parter ha revendido las plantas al grupo industrial Riesgo, que no despierta ninguna confianza entre las plantillas. De hecho, la de A Coruña ya se ha movilizado contra los nuevos gestores porque no se fía de las buenas intenciones que manifiestan. La ministra Maroto, por su parte, ha reconocido que existe una «gran preocupación» y que albergan «muchísimas dudas» sobre los términos de la operación con Riesgo.

Para más inri, entre el jueves y el viernes tocaba cobrar el sueldo del mes. Y este no ha llegado a todos, según el comité gallego.

Alcoa, además de desautorizar la reventa, presiona a Parter para que o rompa con Riesgo o lo obligue a cumplir los requisitos del acuerdo de venta. La empresa no precisa cuáles son, pero podría tratarse de presentar una garantía de liquidez o aval, como tuvo que hacer Parter (este depositó 27 millones). La presión consiste en retener el dinero que la multinacional se comprometió a inyectar al nuevo propietario durante los dos años de estabilidad (100 millones en total), y que están en un depósito notarial. Esto podría explicar el retraso de las nóminas.

Una semana más de plazo

Alcoa le había dado de plazo a Parter hasta este jueves 28. Ahora lo ha ampliado hasta el 4 de junio. La situación de las plantas parece, pues, preocupante.

Además, como dentro de esa guerra subterránea para conseguir el plácet de Alcoa a la reventa, Riesgo ha llegado a denunciar irregularidades contables en las fábricas durante los años 2018 y 2019. Fuentes de la multinacional del aluminio precisaron que la compañía «sigue el más alto nivel de estándares éticos [...], es una empresa de reputación reconocida por sus prácticas contables, que siguen los estándares internacionales que son auditados por una firma global y externa».