
Las tiendas de proximidad avanzan, de la mano de BBVA, en soluciones de pago a distancia, sin necesidad de implantar desarrollos informáticos
18 may 2020 . Actualizado a las 18:53 h.El coronavirus ha acelerado la implantación de algunas tecnologías en el comercio español. La pandemia ha cambiado la manera de relacionarse que tenían empresas y clientes. Y no solo en las grandes tiendas. También en los establecimientos de proximidad, en los que se sitúan en los barrios. Y muchas de estos locales han acelerado su proceso para ponerse al día y ofrecer a sus clientes las mejores condiciones de seguridad. Tal y como explican desde BBVA, los pequeños comercios avanzan de la mano de la entidad en soluciones de pago a distancia, sin necesidad de desarrollar grandes sistemas informáticos ni poner en marcha una tienda on-line. «Esto permite afianzar a los clientes que prefieren seguir comprando a distancia en las primeras fases de la desescalada», explican desde el banco.
De esta forma, BBVA ofrece a los comercios españoles la solución Paygold, que incorpora sistemas de pago sencillos como por ejemplo, Bizum. «En la actualidad, el 40 % de los comercios que utilizan Bizum son clientes de la entidad financiera», sentencian. Las cifras, explican, hablan por sí solas. En las últimas semanas, más de 106.000 clientes de BBVA se dieron de alta en este servicio, que ofrece múltiples alternativas y el importe medio de las operaciones subió un 7,3 % desde el mes de marzo.
¿Qué es Bizum?
Este sistema facilita la transacción de dinero entre dos particulares, con solo conocer el número de teléfono del destinatario. Desde finales del 2019, además, los comercios también pueden utilizar este método de pago para pedidos a distancia, integrado en la solución Paygold BBVA. «Algo que ha tenido especial éxito en las últimas semanas, donde prácticamente se han cuadriplicado el número de transacciones en comercios clientes de BBVA, debido a que se han disparado los envíos a domicilio de los pequeños comercios para evitar los desplazamientos de la población, sobre todo de los colectivos de riesgo», explican.
Este tipo de soluciones permite a los establecimientos vender a distancia a pesar de no disponer de una página web. Además, el mensajero tampoco necesitaría un terminal punto de venta (TPV) móvil para realizar el cobro. Todo funciona a través de un mensaje SMS o por correo electrónico con un enlace al comprador, para que este finalice el proceso de compra en su teléfono móvil o en el ordenador.
Formación a los comercios
BBVA ha puesto en marcha un programa formativo profesional y gratuito, de diez sesiones que se pueden consultar a través de Internet. El objetivo es facilitar todo lo posible la recuperación del pequeño comercio tras la crisis sanitaria.
A través de este ciclo formativo, que estará disponible en la web de BBVA en las próximas semanas, los comerciantes han aprendido las claves para vender en redes sociales, Whatsapp o e-mail entre otros canales. Tal y como explicaron, también han ofrecido claves de logística, lo que les permitirá a los comercios enfrentarse a las etapas de la desescalada con herramientas diferenciadoras, que impulsen las ventas a distancia.
El dinero en efectivo perderá peso, con más rapidez, a causa de la situación actual. La penetración de esta fórmula de pago era alta antes de la crisis sanitaria en relación a otros países del norte de Europa, donde el pago con tarjeta es mayoritario. Durante las últimas semanas, las autoridades sanitarias españolas aconsejaron limitar el uso de efectivo, ante la posibilidad de contagio. «Los clientes de BBVA han seguido estas recomendaciones y el pasado mes se produjo una caída de la retirada de efectivo en los cajeros», explican desde el banco. Además, la situación actual ha propiciado que, tanto comercios como clientes se hayan adaptado y estén utilizando formas de pago con tarjeta o móvil en los establecimientos, incluso para tikets bajos: «Desde el comienzo de la crisis, BBVA ha tomado medidas para ayudas a los clientes en relación al uso de efectivo. Entre otras medidas, se ha elevado el límite de pago contactless para poder pagar sin PIN y con pago móvil de hasta 50 euros, para evitar el contacto de los usuarios con el TPV del comercio».