El sector aéreo calcula una caída en sus ingresos de 15.000 millones en España

Carlos Punzón
carlos punzón VIGO / LA VOZ

ECONOMÍA

Álex Zea (Europa Press)

Toda Europa movió el mes pasado igual número de viajeros que Palma en abril del 2019

13 may 2020 . Actualizado a las 15:47 h.

«Los aeropuertos de Europa están de rodillas». La desesperación del sector fue representada así por Olivier Jankovec, director general del ACI Europa, agrupación que representa a más de 500 aeropuertos de 46 países del continente. Sus cuentas dibujan a las terminales europeas con 315 millones de pasajeros menos desde el comienzo de la crisis sanitaria respecto al año pasado y el temor a que al final la pérdida supere los 500 millones de billetes que se han dejado de vender.

Abril, mes tradicional de viajes por las vacaciones de Semana Santa, se ha cerrado con solo 2,8 millones de pasajeros en vuelos en toda Europa, una cifra similar a la que ese mes del 2019 movió el aeropuerto de Palma de Mallorca, el tercero de España.

El desconcierto en el sector es absoluto. La compra de billetes se programa mayoritariamente con cierta antelación, y las medidas contra el coronavirus varían cada semana. España impedirá desde el viernes la entrada de viajeros incluso del espacio Schengen y la medida se extenderá hasta el día 24, con la advertencia del Gobierno de que podría haber más prórrogas, con lo que cualquier programación de viajes que se haga puede verse alterada. Los extranjeros serán sometidos a cuarentenas de 14 días y los españoles deberán acreditar su residencia habitual en el país.

250.000 vuelos menos

En todo el país, el número de vuelos cancelados entre marzo y mayo superó los 250.000 y casi 144 millones de pasajeros los que dejaron de volar, el 41,4 % de todo el tráfico del año pasado. Advierte el presidente de la Asociación de Líneas Aéreas, Javier Gándara, que semejante parón pone en riesgo la continuidad de 900.000 empleos del sector aéreo en el país a causa de una caída en los ingresos de unos 15.000 millones de euros, lo que, advierte el también director general de EasyJet, tendrá un impacto en el PIB nacional de hasta 55.000 millones de euros, el equivalente a un descenso del 4,1 %.

Las medidas de restricción a la movilidad en medio mundo, la incertidumbre sobre cómo evolucionarán en las próximas semanas, con las compañías con miedo a activar vuelos que supongan nuevas pérdidas por cancelaciones, y la crisis económica que sufrirá una buena parte de la población, el sector aéreo habla ya de «daño irreversible» en muchas terminales y aerolíneas.

La ACI subraya que el verano representa hasta el 70 % de la facturación de los aeropuertos regionales, pero añade que ni los de mayor tamaño superarán sin ayudas esta crisis. Lo mismo señalan las aerolíneas que operan en España, que advierten a través de su presidente de que «la recuperación económica no podrá darse sin la previa recuperación del sector aéreo».

Las compañías concretan sus peticiones al Gobierno en que se les permita extender los ERTE por fuerza mayor más allá de que se levante el estado de alarma y mientras dure la crisis del sector, lo que estiman sucederá hasta que recuperen el 70 % de la facturación perdida. Eliminar las tasas aeroportuarias y de navegación durante ese mismo tiempo o que los Gobiernos no tengan el freno de la UE para compensar a sus terminales o para reactivar rutas están ya encima de la mesa del Consejo Europeo en Bruselas.

China empieza a activarse

La consultora de aviación OAG ha monitorizado la pérdida de vuelos en todo el mundo durante la pandemia, con cifras medias que llegan en abril al 65 % o superarán en mayo el 68 %. En España dejaron de despegar el mes pasado el 92,4 % de los viajes que lo habían hecho en abril un año antes, cifra que solo se iguala en Hong Kong entre los principales destinos de todo el mundo. China es el país que empieza a tirar del consumo aéreo y se atisban síntomas de reactivación en América Latina.

Un verano que no llegará ni a la mitad de la oferta en las terminales de Galicia

Iberia se había aventurado a ser la compañía que liderase la reactivación de la oferta aérea en Galicia. La aerolínea española había programado tres vuelos semanales a Madrid desde A Coruña y Vigo a partir de la tercera semana de mayo. Pero dicho calendario se ha venido abajo y se queda con el vuelo semanal a la capital, como hasta ahora, debido a que aún no están permitidos más que los viajes justificados, y las dos comunidades llevan ritmos de desescalada distintos.

La actividad no es mayor en el aeropuerto de Santiago, que mantiene un único vuelo, el de Vueling a Málaga los domingos, pero se ha dejado de programar ya a partir del día 17.

Y con ese escenario, las fases de la desescalada y la incertidumbre de las normas que el Gobierno pueda establecer en cuanto a movilidad, y las que existen en otros países también, el sector aéreo español no prevé recuperar los vuelos hasta finales de junio, y la demanda, aún unas semanas más tarde.

Ryanair, líder en Lavacolla, ya ha advertido que operará a partir de julio en toda Europa y solo el 40 % de sus viajes. Binter, la aerolínea que une Vigo con Canarias y Tenerife, no volverá, al menos, hasta el 2 de septiembre, y Air Europa y Vueling tampoco dan señales de un inicio de actividad cercano, con lo que la temporada de verano se pondría en marcha ya casi en vacaciones y las estimaciones del sector calculan que cubrirán un tercio de lo anteriormente programado en un año vital para fidelizar pasajeros antes de la llegada del AVE.