El paro aumentó en 185.000 personas en los primeros 20 días de abril

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ECONOMÍA

Europa Press

Según el último dato del SEPE, en España ya hay más de 3,7 millones de desempleados

21 abr 2020 . Actualizado a las 19:59 h.

Las cifras de desempleo no dan tregua. La crisis del coronavirus sigue arrastrando a decenas de miles de trabajadores en España. Según explicó la ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, desde el pasado 12 de marzo el paro registrado se ha incrementado en 484.678 personas, con dos fases diferentes.

Según señaló durante su intervención en la Comisión de Trabajo, Inclusión, Seguridad Social y Migraciones en el Congreso, el último dato disponible del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE), más de 3,7 millones de personas están actualmente en el paro. 

Las dos fases de las que habló la ministra se dividen en una primera «más intensa», entre el 12 y el 31 del pasado mes, cuando el desempleo registrado aumentó en 302.265 personas, mientras que en los primeros 20 días del mes de abril se registró un crecimiento de 185.270 personas. Díaz apuntó, además, que en el mes de abril el ritmo de crecimiento de estas cifras es mucho menor que el que se produjo en marzo: «El proceso de destrucción de empleo se ralentiza en primer lugar y después se detiene a principios de abril por el impacto de los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE)», remarcó.

Hay incluso algunas cifras que invitan al optimismo. Porque durante la primera mitad del mes de abril, la afiliación aumentó en más de 21.000 personas. Por sectores, en materia de creación neta de empleo, Díaz señaló que desde el 13 al 16 de abril incrementó la afiliación a la Seguridad Social en el sector servicios con casi 12.000 trabajadores y con una media diaria de casi 4.000 personas.

Este sector, según la ministra, que ha usado datos del Ministerio de Seguridad Social, ha sido el que más ha sufrido la pérdida de empleo en términos absolutos como consecuencia de esta crisis. De hecho, se han perdido casi 645.000 afiliados entre el 11 y el 31 de marzo, el 72 % del total de empleos destruidos.

Los ERTE seguirán exonerados de cotización tras levantarse el estado de alarma

La ministra de Trabajo defiende que las medidas de excepcionalidad todavía serán necesarias durante unos meses

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La vida no volverá a la normalidad de un día para otro una vez que el Gobierno comience a levantar el estado de alarma, Y, tal y como defiende el Gobierno, ante estas circunstancias habrá que seguir reforzando al tejido productivo con medidas específicas. Tal y como informó la ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, tras el levantamiento del estado de alarma, y durante un tiempo que todavía no ha especificado, los expedientes de regulación temporal del empleo (ERTE) mantendrán exoneradas o reducidas las cuotas sociales y los trabajadores afectados cobrarán el desempleo.

Durante su comparecencia este martes en el Congreso, la ministra ha explicado que en una primera etapa, posterior a la vigencia del estado de alarma, todavía serán necesarias medidas de excepcionalidad, como los ERTE por fuerza mayor que «seguirán teniendo gran relevancia por lo cual deberá mantenerse transitoriamente el mecanismo de apoyo establecido durante la etapa de crisis sanitaria aguda». Lo que no ha querido desvelar Díaz es el calendario que maneja el Ejecutivo. Y es que tal y como explicó, la duración exacta de la prolongación de esta medida y su aplicación por sectores está siendo debatida en la mesa de diálogo social con patronal y sindicatos.

Lo que sí ha revelado es que los ERTE evolucionarán después de esta primera fase para dar respuesta a las nuevas necesidades de las empresas, que serán fundamentalmente por causa económica, técnica, organizativa o de producción. Además, también evolucionarán los mecanismos de exención o reducción de cotizaciones a la seguridad social y la protección de desempleo durante el ERTE de acuerdo a estas nuevas situaciones. 

También podría volver a ponerse en funcionamiento la figura del permiso retribuido recuperable. Eso sí, siempre y cuando sea pactada entre empresa y trabajador en la primera fase de vuelta a la normalidad laboral. Díaz explicó que de cara a la recuperación se han delimitado dos etapas: una de excepcionalidad atenuada y otra de normalidad atenuada. En este sentido aseguró que la figura del permiso retribuido recuperable puede mantenerse como una posibilidad, «que se podrá utilizar si hay acuerdo entre la empresa y los representantes» e incidió en que puede formar parte de las negociaciones frente a un ERTE para su habilitación a tiempo parcial (una reducción de jornada recuperable).

«El hecho de que sea negociado permite evitar su imposición por la parte empresarial. Y puede servir para justificar la subsidiariedad, e incluso para acceder a exenciones o reducciones»,señaló. Díaz que defiende la importancia de unos servicios públicos «que nos arropan en la adversidad» pidió a los partidos políticos hacer una «defensa colectiva» de ellos y cerrar un gran Acuerdo contra la Precariedad. «No podemos permitir que esta crisis acentúe las desigualdades ya existentes en nuestro mercado laboral», sentenció.

En cuanto al programa Mecuida, puesto en marcha para poder conciliar el trabajo con el cuidado de los hijos por el cierre de los colegios, Díaz señaló que se mantendrá más allá del estado de alarma y que en la siguiente etapa se reformulará su contenido para consolidarlo en el ordenamiento jurídico. «Se planteará una figura intermedia entre el Mecuida y el actual art. 34.8 del Estatuto de los Trabajadores, para generar un derecho de adaptación del tiempo de trabajo a las personas con necesidades de cuidado», ha señalado.

Asimismo, valoró que el teletrabajo haya llegado para «quedarse» y destacó que se trata de una figura laboral que convendría potenciar y revisar para adaptarlo, por ejemplo, a los sistemas de registro horario. Puntualizó que la situación de aislamiento ha puesto de manifiesto que deben existir sistemas fiables y homologados de teletrabajo que aseguren el cumplimiento de la prevención de riesgos y de la jornada laboral.

Díaz aseguró que las medidas laborales puestas en marcha hasta ahora están siendo eficaces, que en abril ya se ve una cierta estabilización en el empleo y que el Ministerio trabaja «intensamente» con patronal y sindicatos para acordar cómo enfrentar las sucesivas fases.

Además, ha dicho que la utilización de la cuota de formación de las CCAA para afrontar el COVID-19 no ha afectado al resto de políticas activas de empleo y no ha impedido seguir transfiriendo a las autonomías una importante suma para que desarrollen, con flexibilidad en la asignación de recursos, sus propias políticas.