Una empresaria de la construcción: «No podemos despedir ni acogernos a ERTE»

c. p. REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

Jesús Diges | Efe

A. H. se ha tenido que endeudar para poder afrontar los gastos mensuales de la sociedad que comparte con otros tres autónomos

05 abr 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

A. H. son las siglas ficticias tras las que se oculta una empresaria de la provincia de A Coruña dedicada a la construcción e instalaciones. Se ha tenido que endeudar para poder afrontar los gastos mensuales de la sociedad que comparte con otros tres autónomos y un empleado. Solo este mes ascienden a casi 15.000 euros entre el pago de cuotas, nóminas, seguros, préstamos de inversiones previas, hipotecas y cotizaciones a la Seguridad Social: «He pedido un crédito para subsistir tres meses, pero si esto dura más, me muero», asegura. Está «enfadadísima» por la gestión del Gobierno: «No podemos despedir ni acogernos a un ERTE como el sector de la hostelería. Es una ruina», denuncia.

Lleva 25 años trabajando y ha logrado sobrevivir a la crisis de la construcción, pero no sabe si saldrán de esta: «Pinta muy mal y luego, ¿cómo empiezas? Eso será lo complicado. Trabajamos para particulares, pero a partir de ahora se va a restringir mucho el gasto. Si la gente tenía que poner una calefacción o una fotovoltaica ya no lo harán», explica.

«En un día no puedes recoger»

También se queja de la improvisación a la hora de decretar los confinamientos: «No puedes hacerlo de la noche a la mañana. Tuvieron tiempo para avisar. En un día no se pueden recoger todos los equipos de las obras». Esa es una de las críticas compartidas en el sector. La precipitación de la medida ha obligado a muchos a dejar los materiales abandonados y expuestos al robo, como ocurre con el cobre: «Si hubiesen avisado antes podríamos haber terminado obras y pedidos en curso. Ahora no podemos cobrar», lamenta.