Autorizados, y obligados, a circular

María Cedrón REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

VÍTOR MEJUTO

Transportistas cuentan cómo es su trabajo, en unos días en los que su labor es clave, como parte de la cadena de suministro de alimentos de la granja a la mesa

27 mar 2020 . Actualizado a las 13:12 h.

No hay corrillos para charlar y, de vez en cuando, darle unas caladas al pitillo en el área de servicio del concello de O Corgo (Lugo). Tampoco para hablar de cómo está la ruta mientras se toma un café en la barra de la cafetería de la gasolinera. Es el cuarto día del estado de alarma. Luis descansa en la cabina de su camión. Describe cómo llevan los trabajadores como él, autorizados (y obligados) a circular para garantizar el suministro de alimentos y otros bienes esenciales, el largo camino que les queda por delante. «A ver cuándo acaba todo», se pregunta. No sabe que la cosa va para largo.

Es autónomo. Carga lo que le echen. Está acostumbrado a la carretera. A las seis de la mañana salió de Zaragoza con destino a Ferrol. Son poco más de las dos y ha parado a descansar en esta área de servicio. Como el resto de compañeros que han aparcado sus camiones en batería y miran afuera desde la cabina.

A Luis le queda poco hasta llegar a su destino. Aunque el Gobierno ha suprimido los horarios de conducción y descanso establecidos por la ley, ha preferido parar un rato. Lo justo para comer un bocadillo y estirar algo las piernas. «No tenemos dónde parar para ir al baño, ni tampoco dónde comer algo caliente. Podemos coger un café para llevar, pero nada más. Hoy he comido lo que llevo conmigo aquí, un bocadillo», explica.

El martes, entre Zaragoza y O Corgo, no encontró baños abiertos en ninguna de las gasolineras o áreas de servicio en las que trató de buscar uno operativo. Y eso que el Gobierno permite durante el estado de alarma que estos servicios puedan ser usados por estos profesionales. No hay que olvidar que forman parte de la cadena que lleva los productos de la granja y del mar a la mesa. Y que, sin ellos, en las estanterías del supermercado no habría, por ejemplo, fresas de Huelva, el jamón cocido que hacen en la fábrica de La Bureba, en Burgos, o merluza del pincho.

Porque según los datos de la Federación Nacional de Asociación de Transporte Española (Fenadismer), en nuestro país la gran mayoría de las mercancías, el 85 %, se trasladan por carretera. Es más, en base a la estadística que maneja la plataforma logística on-line Ontruck, desde que entraron en vigor las medidas de prevención derivadas del estado de alarma adoptado para frenar el coronavirus, el transporte de mercancías de primera necesidad se ha triplicado. Son un ejército.

Cerca de donde ha aparcado Luis su camión descansa Javier. Viaja en un vehículo frigorífico en el que salió por la mañana de A Coruña para llevar a Ponferrada la carga. Ya va de vuelta, con la sensación de haber hecho su trabajo, pero también con la incertidumbre de no saber hasta cuándo serán llaneros solitarios con apenas servicios externos para hacer menos pesado el camino. Sabe que le quedan muchos kilómetros de bocadillo y café para llevar, pero ahí estará. A pie de ruta.

El tráfico de vehículos pesados solo se redujo un 22 %

De la importancia que tiene el transporte de mercancías da cuenta que el tráfico de vehículos pesados solo se redujo un 22 % en la primera semana del confinamiento forzado por el estado de alarma, una caída mucho menor que la sufrida en el tráfico de pasajeros (que fue del 70 % en el caso de los vehículos privados). Datos que, «dada la actual situación extraordinaria, hacen pensar que no habrá problemas de abastecimiento», tal y como destacó ayer la secretaria general de Transportes, María José Rallo.

Mascarillas para camioneros

Para contribuir a proteger a los camioneros en una labor clave para asegurar la buena marcha del país en esta situación excepcional, el Ministerio de Transporte ha adquirido un lote de mascarillas que serán distribuidas de forma gratuita a los camioneros en 600 puntos de toda España gracias a un acuerdo entre la petrolera Galp y la Federación Nacional de Asociaciones de Transportistas de España (Fenadismer). En concreto, las mascarillas estarán disponibles en los próximos días en las más de 560 estaciones de servicio que Galp tiene en la Península y en Baleares y en las 40 agrupaciones territoriales de Fenadismer.

Los profesionales que las precisen pondrán solicitarlas al personal de la estación de servicio, quienes realizarán un control de suministro para evitar un uso inadecuado.