Las tiendas están registrando avalanchas de clientes para llenar sus depensas
21 mar 2020 . Actualizado a las 18:49 h.Los supermercados y centros de distribución alimentaria de toda España, sobre todo los de aquellas ciudades donde los contagios por el coronavirus son más numerosos, han reforzado sus protocolos de higiene y limpieza más allá de lo habitual, ante la elevada afluencia de clientes que están registrando por el temor a un posible aislamiento de la población.
Los grandes grupos consultados coinciden en señalar que han actualizado toda la información en torno a las medidas extraordinarias a aplicar, al tiempo que las comparten con todos los colabores que intervienen en la cadena de abastecimiento. Algunas compañías, como la francesa Auchan, ponen a disposición de los usuarios geles de alcohol higienizando y han reforzado los protocolos de limpieza según lo establecido por las autoridades sanitarias. Así lo señalaron fuentes del grupo galo.
Desde Mercadona recalcan que de manera habitual disponen y utilizan «elementos de limpieza y desinfección que garantizan la seguridad alimentaria e higiene en las tiendas».
Pese a todo, las cadenas de alimentación de toda España agrupadas en Asedas (Asociación Española de Distribuidores, Autoservicios y Supermercados) han acordado un criterio común en torno a las medidas que en este escenario extraordinario aplican a sus establecimientos en todo el país. Fuentes del sector señalaban ayer que en cada uno de los puntos de venta de las compañías asociadas se aplican las recomendaciones sanitarias establecidas por el Gobierno, como la aplicación de productos desinfectantes en los recintos con mayor tránsito y el uso de estos mismos productos por el personal en contacto con los clientes.
Y como la propagación del virus no conoce de fronteras, medidas como estas se aplican también en otros país. Incluso más estrictas. El gigante norteamericano de la distribución Walmart es un buen ejemplo de ello. Ha extremado la limpieza de sus instalaciones, especialmente en aquellas áreas por las que transitan a diario miles de personas.
Las labores de desinfección que se están llevando a cabo estos días traen aparejado un incremento de las tareas de los trabajadores encargados de ellas, especialmente en las zonas de más tránsito de clientes para que se mantengan limpias durante todo el día. El incremento del trasiego de personas, explican desde el sector, requiere una atención más cuidada con limpiezas adicionales, por ejemplo, de los cestos y los carros de la compra, así como de las áreas donde confluyen los usuarios, como la zona de cajas.
Dónde y cuánto sobrevive el coronavirus
Las tiendas con artículos de primera necesidad son de las pocas que mantienen sus puertas abiertas en una situación de emergencia. Y en las que más cantidad de personas se concentran por metro cuadrado. Colas en los accesos y en las cajas de pago de la mayoría de las cadenas de alimentación, se han convertido en una imagen habitual estos días. De ahí que sea necesario extremar las medidas de higiene. Porque el coronavirus sobrevive en todo tipo de superficies, en unas más que en otras. Robert Redfield, director de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE. UU. analiza en cuáles de las que es habitual encontrar en los supermercados puede encontrarse el virus.
Del cobre y acero al cartón y el papel. El estudio de Redfield señala que el coronavirus sobrevive unas dos horas sobre los metales, y un período más largo en el caso del papel y el cartón. Respecto a los productos envasados en plásticos y bricks el virus puede sobrevibir un tiempo indeterminado.
Hábitos de compra. Prevalece el sentido común: coger la comida con guantes, nada de manosear los productos y devolverlos al estante; lavar los alimentos frescos —e incluso hacer una limpieza de los envasados— ya con la compra en casa y antes de almacenarlos en las estanterías de las despensas domésticas.
Los consumidores gastan más en desinfectarse que en comer
La crisis sanitaria está obligando a cambiar sobre la marcha no solo los hábitos de la población, sino también sus necesidades de compra. Mientras el retail del textil reclama ayudas por afrontar la debacle en su facturación por el cierre obligado de establecimientos en todoel país, el sector de la distribución bate récords de ventas. El gasto en gran consumo se incrementó un 113 % en tan solo una semana, del 24 de febrero al 1 de marzo, según el último informe elaborado por la consultora internacional Kantar, especializada en la medición y seguimiento de conductas del consumidor. Un porcentaje que se quedó obsoleto en apenas unos días, cuando el Gobierno aconsejó el pasado martes medidas extraordinarias en todo el país. El repunte fue del 154 %, elevándose, solo un día después, hasta el 180 % .
Todos los canales de distribución se han visto favorecidos, unos más que otros. El que ha experimentado las mayores subidas ha sido el de droguería, muy por encima de la alimentación. El aumento en ventas de productos para la higiene aumentó un 245 %; los pedidos por Internet, un 13 %; los supermercados, un 114 %; mercados y plazas,
126 %; y las tiendas de alimentación, un 111 %.
Asimismo, los datos de la consultora reflejan un incremento de ventas en los híper y súper de hasta el 160 % en promedio desde el pasado martes marzo, mientras que las tiendas de proximidad han incrementado un 190 % la facturación.
El estudio sobre el impacto que la situación extraordinaria que vive el país tiene en el consumo también analiza las preferencias de compra por categorías. Y lo que más necesitan los consumidores, a la vista de lo que meten en sus carros, son artículos para la higiene. En mayor medida y por este orden jabón de manos, un 250 %; lejías, 153 %; limpiadores de hogar, 143 %; aseo, 142 %, y celulosas de hogar, 129 %, con el papel higiénico a la cabeza.
Llenar la despensa con productos para comer es indispensable, pero se relega al segundo puesto. En alimentación, sobresale el repunte de las ventas de conservas, 122 %; aguas, 121 % y derivados lácteos 119 %.
Además, el grupo demográfico más preocupado es el de las personas mayores de 75 años, que en una semana duplican sus temores.
Por zonas geográficas, el impacto del coronavirus en los hogares españoles ha ido variando a medida que el contagio se ha ido extendiendo. El pasado martes eran las áreas metropolitanas de Madrid y Barcelona en las que se contabilizaba un mayor aumento del gasto en productos de gran consumo —con crecimientos por encima del 150 %—. Y el efecto que originó la activación de los protocolos extraordinarios elevó las cifras de ventas hasta niveles récords, por encima del 200 %, en las provincias más afectadas. Se trata de unos números que a fecha de hoy podrían ya estar desfasados, a la vista del comportamiento mostrado por la población en todo el territorio nacional. Grandes colas y lineales vacíos eran ayer una imagen común en muchos supermercados.