Dinero más barato, la receta de la Reserva Federal para mitigar el contagio del coronavirus
ECONOMÍA
La Fed, primer gran banco central del mundo en recortar los tipos para combatir los efectos de la enfermedad
03 mar 2020 . Actualizado a las 19:02 h.Que el coronavirus dañará la economía no hay quién lo dude. Lo difícil -imposible, más bien- en estos momentos es predecir cuán grave será la enfermedad y qué secuelas dejará la epidemia en el crecimiento mundial.
Dijo la OCDE el lunes que estamos ante «el mayor peligro» desde la crisis financiera global. Casi nada. Y esperaban desde entonces los mercados -y sus habituales- algún gesto de las autoridades económicas. Y no uno cualquiera. Una acción coordinada de los bancos centrales, para ser más exactos. Alentados, entre otras cosas, por el giro en el discurso de sus máximos responsables, dejando claro a los inversores su intención de echar mano de todas las herramientas a su alcance para combatir al coronavirus en su faceta económica. Que la tiene.
No ha sido coordinada. Pero puede que sea en cascada. Al frente, la Reserva Federal (Fed) estadounidense. Como casi siempre -por no decir siempre- cuando se presenta una crisis, la máxima autoridad monetaria estadounidense se convirtió ayer en el primer gran banco central del mundo en mover ficha. De emergencia. En una reunión extraordinaria. Dos semanas antes de que tocase Comité de Mercado Abierto. Por unanimidad. Y con contundencia: una rebaja de medio punto en los tipos de interés, que deja el precio oficial del dinero al otro lado del Atlántico entre el 1 y el 1,25 %.
Para regocijo de Trump, que lleva meses pidiendo machaconamente a Jerome Powell, el presidente de la Fed, nombrado por él mismo, que baje los tipos de interés. Pero, esa, es otra historia.
No suele la Fed tocar los tipos de interés fuera de sus reuniones periódicas. La última vez que lo hizo fue tras la caída de Lehman Brothers, en el 2008. Y antes de eso, en 1998, tras la quiebra del fondo de alto riesgo (hedge fund), Long-Term Capital Management (LTCM), que como Lehman -aunque la mayoría no lo recuerden-, puso al mundo de rodillas. Pero esa, también es otra historia.
Mensaje de tranquilidad
Con todo, Powell dejó sobre la mesa un mensaje de tranquilidad al mercado. «La economía sigue fuerte. Y los mercados financieros funcionan con normalidad», aseguró en la rueda de prensa posterior a la reunión. Y justificó la medida apelando a la «elevada incertidumbre» que ha introducido el coronavirus, que «lastrará la economía estadounidense y la mundial», aunque aún no se refleje en los datos.
El BCE prepara un plan de préstamos para pymes afectadas por la epidemia Le toca el turno, pues, al BCE. Siempre más lento que su homólogo estadounidense. Dijo el lunes su presidenta, Christine Lagarde: «Estamos preparados para tomar medidas apropiadas y específicas, según sea necesario y de acuerdo acorde con los riesgos subyacentes». A ver cuáles son y cuánto tardan en llegar.
Aseguraba ayer la agencia Reuters, toda una Biblia para los mercados, que la máxima autoridad monetaria europea está trabajando, entre otras cosas, en un plan de préstamos para pymes cuyos negocios se vean afectados por la epidemia. Pero, también decía que la medida no será inmediata. Entre otras cosas porque en el seno del BCE, cómo no, hay división de opiniones sobre si se deben activar ya o no mecanismos para atajar el contagio.
