Los Domínguez abren la gestión de Bimba y Lola a asesores externos

m. s. d. VIGO / LA VOZ

ECONOMÍA

cedida

A punto de convertirse en quinceañera, Bimba y Lola, el grupo de moda con sede en Vigo, da un nuevo estirón en su desarrollo orgánico

23 ene 2020 . Actualizado a las 14:21 h.

A punto de convertirse en quinceañera, Bimba y Lola, el grupo de moda con sede en Vigo, da un nuevo estirón en su desarrollo orgánico, con la constitución de su primer consejo de administración, que estará presidido por Uxía Domínguez, socia fundadora de la compañía, junto a su hermana, María Domínguez, que pasa a ocupar la vicepresidencia. El nuevo órgano de gobierno incorpora a José María Castellano, patrono de honor de la Fundación Santiago Rey Fernández-Latorre y directivo de amplia trayectoria en España y en Galicia (fue vicepresidente y consejero delegado del grupo Inditex, presidente de ONO y presidente de NCG Banco). Se sentará en el consejo junto al empresario e ideólogo de Bimba y Lola, además de patriarca, Jesús Domínguez; Fernando Martínez, director financiero de Inmoglaciar, promotora del fondo Cerberus; José Manuel Martínez, consejero delegado de Bimba y Lola; Cristina Trujillo, que fue consejera delegada de Etnia Barcelona y consejera de Desigual; y Eva Hernando, que será también la secretaria del consejo y es socia responsable del área mercantil de Grant Thornton en Galicia.

En las primeras declaraciones públicas, desde la creación de Bimba y Lola en el año 2005, la presidenta del grupo, Uxía Domínguez, valoró la nueva etapa que se abre en la compañía: «Hoy es un día especial para nosotros. Abrimos la compañía a un consejo que incorpora perfiles independientes y valiosos que nos ayudarán enormemente a desarrollar nuestra estrategia, sin renunciar a nuestro carácter familiar», manifestó.

Actualmente, el grupo de moda está presente en 17 países, con un total de 290 tiendas: 168 en España y 122 en el resto del mundo.

Solo el año pasado, Bimba y Lola abrió 35 nuevos establecimientos en el exterior y aterrizó en Italia, Guatemala y Ecuador. Entre sus nuevas escalas figuran Malasia y Hong Kong, una arriesgada apuesta, ya que está considerado uno de los mercados más relevantes para las marcas de lujo.

La firma tiene 1.481 trabajadores en nómina y su crecimiento en la última década está siendo meteórico. Cerró el 2018 con una facturación de 201,3 millones de euros, un 11,4 % más que el año anterior.