La marcha de As Pontes pide a Endesa más fiabilidad en las segundas pruebas

Alejandro García Chouciño
A. G. Chouciño A CORUÑA / LA VOZ

ECONOMÍA

EDUARDO PEREZ

Los afectados por el parón de la térmica instan a las administraciones a mantener la presión sobre la eléctrica

18 dic 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

La última etapa de la marcha por una transición energética justa que han protagonizado los afectados por la paralización de la central térmica de Endesa en As Pontes durante varios días llegó ayer a su fin en A Coruña.

Cerca de 250 personas comenzaron a las 11.30 horas la etapa de seis kilómetros por la avenida de Alfonso Molina. Su primera parada fue ante el viceconsulado de Italia, país de origen del propietario de Endesa, el grupo Enel. El trayecto terminó en María Pita, donde fueron recibidos por la alcaldesa de la ciudad, Inés Rey. La protesta fue secundada por trabajadores de la central térmica, transportistas, empresarios, políticos y vecinos de la villa minera, que quisieron arropar a los caminantes.

La Policía Local de A Coruña informó que durante el trayecto, los trabajadores llegaron a ocupar los tres carriles de la avenida Alfonso Molina provocando así algunas retenciones de tráfico.

Ante el viceconsulado de Italia, el alcalde de As Pontes, Valentín González Formoso, reclamó a Endesa que muestre un «compromiso real» con la alternativa de que la central pueda volver a funcionar con biocombustibles. Se hicieron una primera tanda de pruebas mezclando carbón con distintas materias, como biomasa o lodos de depuradora, pero Endesa determinó que su uso no era viable ni técnica ni económicamente. Pero tras una reunión con las administraciones, la eléctrica ha accedido a hacer nuevas verificaciones. Los integrantes de la marcha por la transición justa demandan por ello a la empresa que analice rigurosamente todos los escenarios en esta segunda vuelta de las pruebas.

El alcalde también incidió en que «o apoio social non decae. Aquí hai unha representación moi importante que busca transmitir que estamos de acordo na loita contra o cambio climático pero que, loxicamente, esiximos una transición xusta». En ese sentido detalló que «agora mesmo hai en marcha procesos de avaliación da posibilidade de continuación da central dentro dun proxecto de reconversión do complexo ao ámbito renovable a través dos biocombustibles». Algo que, según González Formoso, depende «da vontade da empresa».

El presidente de la Asociación del Colectivo del Transporte del Carbón, Manuel Bouza, recordó que llevan «seis meses co 90 % dos camións que teñen contrato parados, sen poder traballar, e non se nos dixo aínda que podíamos parar ou que parásemos». Finalmente, se dirigió al Gobierno italiano para decirles que «xa está ben, que paren se queren pero que avisen antes de tomar decisións para que non nos arruinen a todos. Os de As Pontes xa levaron bastante como para non levar máis agora. O pobo deixano desvalixado». Bouza afirmó que agotarán todas las vías en defensa de sus empleos pero que, si Endesa opta por cerrar la planta, no descartan acudir a la vía judicial, ya que algunos transportistas llevan más de 40 años trabajando para la térmica pontesa.

Que los dejen trabajar

El presidente del Comité de empresa de Endesa As Pontes, Luis Varela, quiso agradecer «o esforzo de toda a xente que realizou a pé os 75 quilómetros para reclamar unha transición xusta» y pidió que los dejen trabajar, ya que tienen «os medios e a tecnoloxía de última xeración». Además, esperó una decisión firma de las administraciones, a las que pidió que «nos comprendan e forcen á empresa» a mantener la térmica.

Denuncian que el 90 % de los camiones llevan parados seis meses sin poder trabajar