Intrahistoria del Foro La Toja: ¿Qué les preocupa a ellos?

ECONOMÍA

Martina Miser

Este encuentro de personalidades del mundo de la política y la economía intenta ser un lugar de reflexión y encuentro de grandes pensadores para abordar temas de preocupación para la humanidad

13 oct 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Una mujer joven, de raza negra, vestida de colores brillantes, con un niño colgado en su espalda intentaba vender algunas pulseras, collares, bolsos y carteras. Lo hacía a escasos kilómetros de donde se celebraba el Foro La Toja, lo que intenta ser un lugar de reflexión y encuentro de grandes pensadores para abordar temas de preocupación para la humanidad, para las democracias liberales. Allí estuvieron Mariano Rajoy, Felipe González, Pedro Sánchez, Alberto Núñez Feijoo, y todos ellos, aunque sin saberlo, tenían en el centro de su discurso a aquella mujer negra y a su bebé que una y otra vez recorría las calles de O Grove intentando que vecinos y turistas le comprasen algo.

Ante un auditorio lleno de empresarios -abonaron unos 800 euros por participar durante tres días en el encuentro, una cantidad en la que iba incluida la pensión completa en el Gran Hotel La Toja- los intervinientes explicaron una y otra vez que la riqueza tiene que llegar a toda la población porque, de lo contrario, la exclusión pone en peligro las democracias liberales, en donde están muy presentes los derechos humanos, sociales y económicos como la libertad de empresa y la libertad de expresión. ¡Eso es nada! En definitiva, o la riqueza se reparte de manera progresiva y se da cabida a inmigrantes con talento y fortaleza que ayuden a España a superar los problemas de la natalidad, o todos -incluidos los dirigentes- perderán su situación de bienestar. Como ejemplo una idea expresada por Felipe González: quizá en breve no tengamos ya que resolver el problema de la sostenibilidad de las pensiones porque los salarios son tan bajos que la mayoría de los ciudadanos ya no podrán cobrar ninguna prestación. Rajoy lo respaldó. Entre ellos se notó un buen feeling, parece que el de La Toja no fue el primer café que se tomaron juntos. Se llevan bien y se ríen de sus chistes. Uno con gracia andaluza, el otro con la retranca gallega, y los dos lo tienen claro: las coaliciones son necesarias para alcanzar la estabilidad del país. Y volvieron a reír y hacer reír cuando dijeron: «En la situación actual, los dos, comparados con algunos, como mínimo somos Churchill».

También coincidieron en el día en que abandonaron La Toja: antes de que llegase el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, quizá para dejarle todo el protagonismo.

Habló Steve Pinker, catedrático de Harvard -entre café y café periodistas que cubrían el evento comentaban que había cierto interés sobre cuál había sido su remuneración por haber acudido y hablado menos de media hora. (¿Unos 50.000 euros?)-, y también el presidente de Telefónica, que fue calificado por los asistentes como el mejor de todos los que pasaron por el foro. Su mensaje fue: tecnología, tecnología y tecnología. Y Pablo Isla advirtió: digitalización sí, pero antes de acometer cualquier inversión hay que saber «para qué», que no es poco. Pallete también alertó que los datos personales cuestan dinero, hay que protegerlos y ningún ciudadano -ni la mujer del inicio de esta crónica- se puede quedar excluido de esta nueva revolución porque este hecho traería graves consecuencias políticas , sociales y económicas. Ya lo dijo el rey: la sociedad debe de ser inclusiva. Aplausos a su llegada y a su salida. Curiosamente el foro estuvo muy bien representado por políticos y empresarios catalanes, como Josep Piqué y Duran i Lleida, quienes hablaron y oyeron hablar en Galicia de las mentiras del independentismo catalán, uno de los focos de atención en el foro La Toja. Todo muy curioso.