Los desahucios de casas alquiladas bajan por primera vez en dos años

J. C. MADRID / COLPISA

ECONOMÍA

En Galicia, el 76 % de los lanzamientos se producen por impagos del arrendamiento

07 oct 2019 . Actualizado a las 21:00 h.

Los inquilinos que viven de alquiler están protagonizando la mayor parte de los procesos de lanzamientos judiciales de viviendas, con 9.802 intervenciones en el segundo trimestre del año. Esta realidad ha motivado que, ante la drástica reducción de los desalojos hipotecarios, hasta los 3.806 entre abril y junio, los inmuebles alquilados desahuciados ocupen una cuota cada vez mayor en el número de estas intervenciones, que son las últimas desde que se inicia el proceso por falta de abono. Hasta junio, los desahucios de alquiler representaban más de un 66 % del total, frente al poco más del 25 % que engloban los relacionados con los créditos.

Al mismo tiempo, los casos de desalojos forzosos de viviendas alquiladas se han reducido en un 6,6 % en el segundo trimestre del 2019 por primera vez en los dos últimos años después de varios meses en los que la intervención judicial había acentuado los lanzamientos en inmuebles arrendados. Se trata del primer descenso de este tipo de dramas socioeconómicos que contabiliza el informe del Consejo General del Poder Judicial desde el segundo trimestre del 2017.

Caso contrario es el que se presenta en Galicia, donde el número de desahucios experimentó un aumento del 89,9 % en el segundo trimestre del año. Pero tiene su explicación. Y es que ese porcentaje de crecimiento hay que analizarlo teniendo en cuenta la huelga de funcionarios que entre febrero y mayo del 2018 paralizó muchos de estos expedientes en los juzgados gallegos, por lo que los datos de los dos ejercicios no son comparables. En lo que sí coincide la tendencia en Galicia con la del resto de España es en el protagonismo que tienen los desahucios por impago del alquiler (501 de los 657 que se llevaron a cabo).

Con el paso del tiempo, los desahucios de viviendas arrendadas han ganado protagonismo frente a los derivados de hipotecas. Este hecho revela una realidad: muchos inquilinos no pueden hacer frente al pago de sus recibos por el repunte de los precios del alquiler en los últimos años.