O Rei das Tartas de Mondoñedo se convierte en gasolinero

f. fernández REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

PEPA LOSADA

El empresario invierte 1,4 millones en una estación de servicio en la A-8

29 ago 2019 . Actualizado a las 00:19 h.

Tras cuatro décadas dedicándose a hornear los famosos dulces de Mondoñedo, la empresa O Rei das Tartas se lanza al negocio de las gasolineras. Su marca lucirá sobre una nueva estación de servicio que abrirá próximamente al borde de la autovía del Cantábrico, la A-8, en el Alto da Xesta, en el concello lucense de Abadín, el mismo punto que día sí, día también está cortado al tráfico rodado por una espesa niebla.

Carlos Folgueira, actual ocupante del trono e hijo del fundador, explica que el proyecto comenzó a fraguarse hace tiempo, cuando se dio cuenta de que la apertura del tramo de autovía podría dejar sin clientes a los negocios de Mondoñedo situados a lo largo de la carretera nacional 634. O sea, a los suyos, sin ir más lejos. Y si los conductores se iban a la autovía, él se iría tras ellos. Así fue que hace unos seis años compró varias fincas al borde de la A-8, que ahora suman 12.500 metros cuadrados. Como un año más tarde empezó con los trámites para empezar a construir el área de servicio. Ya está levantada y finalizada la obra, pero pendiente de los permisos de apertura. «Este proxecto foi unha aposta moi forte, están metidos uns 1,4 millóns de euros», detalla el empresario repostero, ahora gasolinero.

El área de servicio O Rei das Tartas no será una más. Para empezar, está situada justo en la rotonda de salida de la autovía hacia Abadín, a mano para los conductores que son desviados cuando cierra por niebla el tramo de autovía. Contará con los previsibles cafetería, tienda y restaurante, pero también con parque infantil y una zona para perros. Dispondrá también un rincón con un busto de Carlos Folgueira sénior para que los clientes puedan hacerse una foto con el mítico fundador de la compañía de tartas.

Los surtidores de gasolina lucirán el cartel de Repsol, pues se trata de una estación de servicio del empresario gallego, pero abanderada de la petrolera.

Trabajarán media docena de personas, según Folgueira.