Los empleos que se ofertan en Galicia, entre los mejor pagados de España

G. Lemos REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

EUROPA PRESS

El salario medio de las vacantes, de 23.800 euros, solo se supera en Cataluña y el País Vasco

18 jul 2019 . Actualizado a las 12:47 h.

Según el Instituto Nacional de Estadística, los salarios gallegos no están, precisamente, entre los más altos de España. Con una media de apenas 21.600 euros brutos por persona al año, solo superan las nóminas de otras seis comunidades (Andalucía, Comunidad Valenciana, Murcia, Castilla-La Mancha, Canarias y Extremadura). Pero la cosa cambia cuando se analizan las nuevas ofertas de trabajo. Según un informe conjunto de Adecco e Infoempleo, las condiciones económicas de los nuevos puestos de trabajo que se crean en Galicia están entre las mejores de todo el país, con un sueldo medio de 23.850 euros, solo por detrás de los que se ofrecen en Cataluña (26.400) y el País Vasco (24.160).

Se trata, matizan los autores del estudio, de datos parciales obtenidos de una muestra de 69.000 ofertas de empleo, lo que explica la aparente contradicción con los datos que ofrece el INE, que sí analizan el conjunto de los asalariados de la comunidad. Que los nuevos puestos de trabajo que salen al mercado en Galicia estén mejor pagados que en regiones más ricas, como Madrid, se podría explicar, según esas mismas fuentes, por los perfiles profesionales más demandados o por el menor diferencial que existe entre directivos y asalariados en las empresas gallegas.

De hecho, en la comunidad el salario medio se ha incrementado con fuerza en el último año (741 euros, según el estudio), lo que le permite superar la retribución ofertada en España, que se sitúa en promedio en 23.812 euros anuales, tras caer un 5 % respecto al ejercicio anterior.

Y es que, aunque la tónica general entre las empresas es la de aumentar plantilla, las contrataciones se hacen, generalmente, con sueldos más bajos de los que tienen los trabajadores ya en activo. Así, de acuerdo al estudio, cuatro de cada diez compañías reconocen que pagan un salario inferior a las nuevas incorporaciones (en algunos casos, hasta un 50 % inferior). De media, la brecha salarial para un puesto idéntico entre un trabajador que lleva menos de un año y otro con más de diez de antigüedad ronda los 9.000 euros anuales.

Aunque las condiciones de entrada son peores, en donde sí se nota la recuperación económica es en la evolución de las nóminas una vez que se ha ingresado en plantilla. De hecho, de las empresas consultadas, más de la mitad (un 51 %) aseguran haber subido los sueldos en el último año, y tan solo una de cada cuatro los mantiene congelados.

Un incremento que en muchos casos no permite recuperar los niveles de ingresos previos a la crisis del 2008, un nivel retributivo que, en la mayoría de compañías (dos de cada tres, por ser exactos), no creen que se recupere hasta el 2025.

De ahí que la mayoría de trabajadores, siete de cada diez, sigan diciendo que no se consideran suficientemente remunerados.

La formación, clave

El estudio incide en otros dos factores que influyen, y mucho, en el salario: el primero es el nivel formativo (un empleado con máster cobra, de media, 12.000 euros más que otro sin estudios) y, el segundo, y todavía más determinante, la categoría profesional. La nómina de un directivo medio es un 45 % más alta que la de un asalariado. Hasta ahí, ninguna sorpresa. Pero es que dentro de los directivos también hay categorías. Así, un director general gana hasta un 60 % más que un director de recursos humanos. Y lo mismo pasa entre los mandos intermedios y los técnicos (entre estos últimos, los médicos especialistas están en cabeza). De los asalariados rasos, los mejor pagados son los encuadernadores y los estibadores, que superan los 35.000 euros al año.

La brecha salarial sigue creciendo, y se acentúa con el retiro: las jubiladas gallegas, las más pobres

Más allá de la dialéctica política, el informe de Adecco e Infoempleo constata que «las diferencias retributivas entre hombres y mujeres son una realidad en nuestro país». Una realidad a la que pone cifras: «Los profesionales varones perciben una remuneración que es, de media, un 18 % superior a la de la mujer».

Y no solo es que haya brecha, sino que sigue ensanchándose. En concreto, en casi 200 euros en el último año, hasta los 3.815 actuales. Las diferencias fluctúan entre los 13.000 euros en el nivel directivo (en el que la presencia femenina es más reducida, sobre todo en los cargos más altos) y los 1.700 de los puestos técnicos, los más paritarios a nivel retributivo.

En el caso de Galicia, otro informe publicado ayer, este del sindicato USO, sitúa a las trabajadoras gallegas como las terceras peor pagadas de España, con una media de 12,63 euros por hora, la misma cifra que perciben las extremeñas, y solo por delante de murcianas y canarias. Son dos euros menos que los hombres. Con más contratos a tiempo parcial y «generalmente ligados a sectores peor pagados y puestos de menor responsabilidad», la brecha salarial se arrastra más allá de la vida laboral, ya que influye también en la pensión. De hecho, según el mismo estudio, las jubiladas gallegas son las más pobres de España, con unos ingresos medios de 718 euros al mes, frente a los 858 del resto de españolas y los casi 1.130 de los hombres en la comunidad.