Pemex nombra director general de Barreras a un almirante mexicano

Manoli Sío Dopeso
m. sío dopeso VIGO / LA VOZ

ECONOMÍA

Mario Alberto Gasque participará de forma activa en la gestión del astillero

16 jun 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Lo que no hizo en seis años lo hará ahora que quiere deshacerse del astillero. Pemex (Petróleos Mexicanos), propietario del 51 % de Hijos de J. Barreras desde diciembre del 2013, ha decidido intervenir de lleno en su gestión y lo hará con la creación de una dirección general adjunta al presidente, José García Costas, que estará ocupada por un vicealmirante de la Armada en la reserva.

Fuentes oficiales de la petrolera han confirmado a este periódico que Mario Alberto Gasque Peña, almirante de la Secretaría de Marina (Semar), dependiente del Gobierno de México, y actualmente retirado, ha sido nombrado director general adjunto de Barreras, y se trasladará a Vigo en próximas fechas para trabajar presencialmente en el astillero.

Gasque tendrá despacho propio en las instalaciones de Beiramar, contiguo al del presidente, y participará de forma activa en la gestión de la empresa, según estas mismas fuentes, que aseguran que su desembarco en Barreras es inminente. La decisión fue adoptada a raíz del consejo de administración celebrado el pasado día 6 en Vigo, al que asistieron tres representantes de la petrolera (dos consejeros y una auditora).

La elección de Mario Alberto Gasque está fundamentada en su experiencia. El almirante de la Armada mexicana es un profesional de prestigio en su país. Es ingeniero naval y durante años ha sido director del Astillero de Marina número 20, el más antiguo del Estado mexicano, con base en Salinas Cruz (Oaxaca). Bajo su gestión esta empresa estatal ha producido una decena de remolcadores y otras tantas patrulleras para la Secretaría de Marina. 

Auditar antes de vender

¿Por qué Pemex decide intervenir ahora en la gestión de Barreras? Fuentes cercanas a la petrolera aseguran que la decisión se enmarca en la estrategia de evaluación y auditoría de todos los activos en los que está inmersa la petrolera desde hace unos meses. Ese es el mandato con el que el presidente mexicano, López Obrador, puso al frente de la compañía paraestatal a Octavio Romero Oropeza, quien, desde su llegada, abandera la lucha contra los numerosos episodios de corrupción detectados en el seno de la petrolera.  

En la junta de accionistas celebrada el pasado mes de febrero, a la que acudió, además de los letrados de un conocido despacho de abogados de Madrid, María Luz Zarza Delgado -la recién nombrada abogada general de Pemex-, la petrolera dejó clara que su intención era poner a la venta su participación y salir del astillero, pero no a cualquier precio, y antes de marcharse quiere tener claros los estados financieros de Barreras. La petrolera no está dispuesta a regalar su 51 % del astillero y, aunque su única función en él desde la entrega del flotel (año 2016) ha sido la de avalista del crucero para The Ritz Carlton, quiere rentabilizar la inversión por la que hace seis años desembolsó 5,1 millones de euros, evitando una venta por debajo de su valor.

Recientemente, el semanario mexicano Contralínea reveló que en noviembre del 2018 Moreno Oropeza frenó una operación movida por funcionarios del Gobierno mexicano para deshacerse del 51 % que la petrolera azteca tiene en Barreras. «El director de Pemex ordenó frenarla a cualquier coste, bajo el argumento de que necesitaba información al detalle sobre esa compraventa accionarial, y solicitó a los españoles tiempo para analizar la sociedad», aseguraba la publicación.

Nueva dirección financiera para tener el control de las cuentas 

La llegada de Gasque Peña podría no ser la única incorporación mexicana ordenada por Pemex al frente de la gestión de Barreras. Fuentes de máxima solvencia próximas a la petrolera avanzan también el inminente nombramiento de un nuevo director financiero en Barreras. La misión encomendada sería la de supervisar y auditar las finanzas de la compañía. El elegido para este puesto sería Álvaro Veralca, que hasta ahora ocupa el puesto de consultor en AB Consultoría y Soluciones Estratégicas, en Ciudad de México.

Mientras, el astillero vigués se encuentra en plena actividad, avanzando en la construcción del primer crucero de lujo para The Ritz Carlton -con fecha de entrega en noviembre de este año- y de dos buques de crucero más para la naviera noruega Havila, que negocia con los bancos la financiación necesaria para poner al día sus pagos con Barreras.

The Ritz Carlton, principal aspirante a la compra del 51 % en propiedad de Pemex, acaba de firmar la adjudicación a Barreras de la segunda unidad de crucero prémium (240 millones de euros, cada uno), con opciones a un tercero.