Una Agencia Tributaria orwelliana

Carlos del Pino PIN & DEL PINO ABOGADOS Y ASESORES TRIBUTARIOS

ECONOMÍA

25 may 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Aunque se pueden añadir otros calificativos a la última de las ocurrencias de la Agencia Tributaria, consistente en comunicar a los contribuyentes las diferencias observadas entre el margen existente en su sector y el que se desprende de la información suministrada por aquellos, considero que el más adecuado es el del título.

Lo cierto es que, desde que Montoro tomara las riendas del Ministerio de Hacienda en un tenebroso diciembre del 2011, ya nada sorprende. El afán recaudatorio, confiscatorio en algunos casos, es el eslogan, valiéndose del sistema de forma tal que los derechos y garantías de los contribuyentes han retrocedido más allá de 1998. El control de movimientos bancarios, la limitación de pagos en efectivo, el suministro inmediato de información... solo tienen como finalidad la recaudación inmediata como antídoto ineficaz contra una deuda pública que ronda los 1,2 billones.

Estas comunicaciones carecen de justificación alguna. Los contribuyentes conocen los datos que el fisco les está facilitando, tanto los propios como los del sector. Por tanto, a mi juicio, la verdadera finalidad de las mismas no puede ser otra que la de poner en conocimiento de los contribuyentes que la Agencia Tributaria ya es orwelliana y, por tanto, advertirles sobre las consecuencias que pueden tener sus actos.

Por último, basta indicar que la diferencia de márgenes informada no tiene implicación alguna. De lo contrario, la AEAT iniciaría, sin más, el procedimiento de comprobación.