Éxodo en la meca del consumismo

Sara Cabrero
S. Cabrero REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

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Versace o Guess son solo algunas de las marcas que han optado por cerrar sus tiendas en este peculiar enclave

16 may 2019 . Actualizado a las 08:07 h.

Las grandes marcas están desvistiendo una de las calles más icónicas del mundo. La Quinta Avenida de Nueva York ya no presume del glamur de antaño. Desde hace algunos meses, la vía en la que Audrey Hepburn se tomaba su cinematográfico desayuno con diamantes soporta de manera estoica la fuga de importantes marcas de moda.

Primero fueron Lord&Taylor y Henri Bendel. Especialmente significativos ambos. Con la salida del primero se pone punto y final a un pedacito de la historia de Nueva York. Y es que Lord&Taylor -los grandes almacenes más antiguos del país- llevaba a sus espaldas más de 104 años de ventas en la céntrica calle norteamericana. La historia de Henri Bendel, también centenaria, es algo más triste. La minorista de lujo bajó la persiana de la tienda neoyorquina, pero también de las otras 22 que tenía repartidas por el país. Ponía fin así a una historia que comenzó con su fundación en 1895 y de la que forman parte importante personajes de la talla de Coco Chanel o Andy Warhol.

Fueron los primeros en irse de la Quinta Avenida, pero no los últimos. Les siguieron muchos más. Ralph Lauren, Gap y Versace también hacían las maletas para buscar algún emplazamiento un poco más económico. La mudanza de estas grandes pronto provocó un efecto contagio. En las últimas semanas, la lista de marcas dispuestas a buscar nuevos horizontes no para de crecer. Tommy Hilfiger y Massimo Dutti son las últimas y todo apunta a que habrá algunas más.

La principal calle comercial de la ciudad de los rascacielos vive tiempos difíciles. Las grandes marcas han sacado la calculadora y se han dado cuenta del esfuerzo sobrehumano que tienen que realizar para mantener abiertas sus tiendas allí. No es para menos. Poner una pica en la Quinta Avenida supone estirar -y mucho- el bolsillo. El precio del alquiler asciende a los 20.733 euros por metro cuadrado al año. Es el segundo arrendamiento más caro del mundo, solo superado por la principal arteria de Hong Kong.

Con estas mudanzas, la tasa de disponibilidad de locales comerciales se encuentra, según un informe de Cushman&Wakefield, en torno al 20 % en todos los tramos de la calle.

Tiffany se va, pero volverá

Hasta la legendaria joyería Tiffany ha cerrado sus puertas. Lo hará, eso sí, tan solo durante dos años. El objetivo es aplicar un profundo lavado de cara al emblemático espacio neoyorquino, que llevaba abierto desde el año 1940. Las obras, que comenzaron este año, terminarán a finales del 2021. Durante este período, trasladará su actividad a la calle 57 con la Sexta Avenida.