La banca endurece la concesión de hipotecas tras asumir el impuesto

J. M. C. MADRID / COLPISA

ECONOMÍA

ANGEL MANSO

Eleva los intereses de los préstamos para comprar casa, mientras suaviza los de consumo

27 jun 2019 . Actualizado a las 19:16 h.

Aunque la mayor parte de los bancos habían anunciado que no repercutirían a sus clientes el coste del impuesto de actos jurídicos documentados (IAJD), la realidad constata que tras asumir sus nuevos deberes tributarios las entidades han endurecido las condiciones de acceso a sus hipotecas. Los criterios que utilizan para determinar si autorizan una operación (ingresos, cuantías sobre el valor, garantías, etcétera) han sido más restrictivos en el primer trimestre del año, según la encuesta sobre préstamos bancarios del Banco de España. Este endurecimiento, aunque «leve» -indica el documento del supervisor-, supone un cambio de tendencia con respecto a las políticas de riesgo que venían aplicando hasta finales del 2018. Justifican esta restricción por el «empeoramiento de las perspectivas» económicas, lo que ha implicado que el porcentaje de peticiones de fondos rechazadas en el inicio del ejercicio haya crecido «levemente».

Lo que sí ha aumentado ha sido la demanda de hipotecas, espoleada por el bajo nivel de los tipos de interés, con el euríbor anclado en tasas negativas, en el entorno del -0,10 %.

Lo que no ha provocado la nueva aplicación del impuesto hipotecario ha sido un cambio relevante en las condiciones de estos préstamos, que se mantuvieron «sin cambios» entre enero y marzo. Lo que sí varió sensiblemente fue el tipo de interés medio, que ha subido por tercer mes consecutivo hasta el 2,38 %. Las entidades trasladan así a los clientes el coste del impuesto registral, que supone un gasto de entre 600 y 2.000 euros (depende del importe de la operación) que hasta octubre abonaban los hipotecados pero que el Gobierno endosó a la banca tras la polémica del Supremo.

Crédito al consumo más blando

En los créditos al consumo, el sector financiero también ha endurecido «levemente» los criterios de concesión, un hecho que ocurre «por segundo trimestre consecutivo», advierte el supervisor. La banca ha paralizado una parte de estos créditos por el «empeoramiento de las perspectivas económicas». Sin embargo, han vuelto a suavizar las condiciones de estas líneas de financiación. Se han convertido en unos productos cada vez más atractivos para los ciudadanos, a pesar de las advertencias de los supervisores por el riesgo de morosidad.

En el sector reconocen que el hecho de que el BCE mantenga su política de tipos en mínimos favorecerá una «relajación» en las condiciones y un aumento del crédito concedido.