El capital riesgo de la Xunta deja de participar en grandes firmas

ECONOMÍA

PABLO ARAUJO

Los fondos de Xes Galicia vuelven a dar beneficios tras acumular casi 70 millones en pérdidas

20 mar 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Xes Galicia, la sociedad gestora de fondos de capital riesgo que está participada mayoritariamente por la Xunta, ha reorientado su actividad en los últimos años hacia iniciativas empresariales vinculadas al emprendimiento y la innovación, y a aquellos proyectos que considera viables. Atrás han quedado los tiempos en los que fue un hospital de campaña que socorría a las compañías en crisis.

Según los últimos datos actualizados, entre los años 2014 y 2018, los fondos de la Xunta han entrado en el capital de 32 pymes con una financiación de 12,9 millones, pero no lo han hecho en ninguna gran empresa. El resultado es que en el 2017, el último balance disponible, los siete instrumentos de Xes cerraron con un balance positivo de 1,8 millones, el segundo ejercicio de beneficios tras el 2016, y después de dejar atrás en los últimos cuatro años unas pérdidas de casi 70 millones.

Durante la crisis, Sodiga acudió al rescate de empresas que atravesaban serios apuros, tomando participaciones en firmas como Filmax, Veirasa, El Grupo Copo o Frinova, la filial de Pescanova. De este fondo también salieron dos préstamos participativos de 15 millones para la malograda Caramelo, y desde otros fondos también se apoyaron otros proyectos fracasados, como fue el caso de Alimentos Lácteos, que llegó a recibir tres créditos por más de 4 millones de euros. En la nómina de empresas socorridas figuran también T-Solar o Sargadelos. Un pasado que contrasta con lo sucedido entre el 2014 y el 2018, período en el que Xes Galicia, aprobó 143 préstamos por 51,2 millones de euros, destinados en casi su totalidad a pequeñas y medianas empresas de la comunidad (139) y con preferencia a emprendedores (50). El Consello de Contas ha pedido a la Xunta que reduzca las inversiones de riesgo para evitar las posibles cuantiosas pérdidas que una estrategia de ese tipo puede acarrear a las arcas públicas.