Pemex quiere «rentabilizar» su salida del capital de Barreras

Manoli Sío Dopeso
m. sío dopeso VIGO / LA VOZ

ECONOMÍA

XOAN CARLOS GIL

Envía a sus abogados para evitar una mala venta de su 51 % del astillero

13 jun 2019 . Actualizado a las 20:32 h.

Pemex ha decidido salir de Hijos de J. Barreras, pero no de cualquier manera, ni a cualquier precio. La petrolera no está dispuesta a regalar su 51 % del astillero y, aunque su única función en él desde la entrega del flotel (año 2016) ha sido la de avalista del crucero para The Ritz Carlton, quiere rentabilizar la inversión por la que hace seis años desembolsó 5,1 millones de euros.

Así lo han expuesto los representantes legales que estuvieron presentes en la junta general de accionistas celebrada este lunes en Vigo, a la que acudieron además de los letrados de un conocido despacho de abogados de Madrid, María Luz Zarza Delgado, la recién nombrada abogada general de Pemex.

La representante legal de la petrolera llegó con el encargo del director general de Pemex, Octavio Moreno Oropeza, de conocer el estado financiero del astillero y rentabilizar la participación de Pemex evitando una venta por debajo de su valor.

Estas pretensiones de negocio de la compañía mexicana obligan a los otros dos accionistas de Barreras Ignacio Lachaga, propietario de la naviera Albacora (titular del 24,5 %) y José García Costas, presidente de Barreras y dueño de Electromecánica Naval e Industrial (12,3 %) y Valiño (10 %), a buscar socios para llevar a cabo la operación de recompra del astillero.

Buscando socios

Esto explica también que Costas y Lachaga hayan lanzado una invitación a la Xunta para que se incorpore al capital del astillero con una participación que oscilaría entre el 20 y el 30 %.

Entre los nombres que han trascendido para completar el accionariado figura el de José Manuel Fernández Alvariño, presidente del grupo Fernández Alvariño, expatrón de la CEG, y gran amigo de José García Costas. Y desde México apuntan el nombre de Carlos Mouriño, presidente del Real Club Celta de Vigo y del grupo de empresas GES, aunque lo hacen desde un punto de vista más «sentimental» ya que, según desvelan estas fuentes mexicanas, la compra de Barreras por parte de Pemex se fraguó cinco años antes de hacerse efectiva durante la presidencia de Calderón, y gracias a la medición del hijo Juan Camilo Mouriño, secretario de Gobernación de Calderón e hijo de Carlos Mouriño.

En todo caso, la presencia de Zarza Delgado en Vigo refleja el interés con el que Pemex quiere hacer seguimiento a la venta de un activo que considera «no estratégico».

Hace unas semanas el semanario mexicano Contralínea reveló que en novimebre del 2018, Moreno Oropeza frenó una operación movida por funcionarios del Gobierno mexicano para deshacerse del 51 % que la petrolera azteca tiene en Barreras. «El director de Pemex ordenó frenarla a cualquier coste, bajo el argumento de que necesitaba información al detalle sobre esa compraventa accionarial, y solicitó a los españoles tiempo para analizar la sociedad», aseguraba la citada publicación.