El Santander hereda la responsabilidad penal por la gestión de Ron y Saracho en el Popular

Redacción LA VOZ

ECONOMÍA

Albert Gea

La Audiencia Nacional recuerda que la adquisición de la entidad no extingue las culpas

17 ene 2019 . Actualizado a las 07:51 h.

El Banco Santander hereda la responsabilidad penal en la causa que investiga la gestión de los expresidentes del Popular Ángel Ron y Emilio Saracho. Así lo ha decidido el juez responsable del caso en la Audiencia Nacional, José Luis Calama, que en un auto hecho público ayer acuerda la «sucesión procesal» del caso hacia el Santander, por ser la entidad que absorbió el Popular tras la resolución de este. De este modo, la entidad presidida por Ana Botín deberá hacer frente a las responsabilidades penales en que pudieran haber incurrido los gestores del otro banco, que ya no existe como persona jurídica. Los delitos que se investigan son los de falsedad societaria y administración desleal contra el mercado, falsedad documental y apropiación indebida.

Y es que, tal y como recuerda Calama, citando el artículo 130.2 del Código Penal, «la transformación, fusión, absorción o escisión de una persona jurídica no extingue su responsabilidad penal», sino que esta se traslada a la entidad que la absorba, en este caso el Santander, que adquirió «en bloque y a título universal todos los elementos patrimoniales integrantes del activo y del pasivo del Banco Popular Español». Por ello, avanza que una vez que se emita el informe pericial sobre la absorción del Popular se tomará una decisión sobre la declaración del representante legal del Santander.

La causa contra los expresidentes del Popular (y de otros miembros de su antiguo consejo de administración) se abrió solo tres meses después de la adquisición del banco por el Santander (que pagó un euro por él). Siguiendo el criterio de la Fiscalía Anticorrupción, el entonces instructor de la causa, Fernando Andreu, abrió dos piezas separadas: la primera de ellas, relacionada con la ampliación de capital realizada en el 2016 por importe de 2.505 millones de euros. La segunda, por la manipulación del mercado mediante la publicación de noticias con datos e informaciones falsas antes de que el Popular fuera vendido al Santander.