«En la basura viene de todo. Ver animales no es nada agradable»

Sofía Vázquez
sofía vázquez REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

Domínguez Lino asegura que antes del primer trimestre del 2019 producirán compost.
Domínguez Lino asegura que antes del primer trimestre del 2019 producirán compost. ANA GARCIA

El presidente de Sogama, Javier Domínguez Lino, destaca el papel dinamizador de la empresa en Cerceda, municipio en el que genera mil empleos

04 dic 2018 . Actualizado a las 17:25 h.

Javier Domínguez Lino (Pontevedra, 3 de diciembre de 1968) es políticamente muy correcto, una cualidad importante en alguien a quien le corresponde presidir una empresa público-privada. Sogama (Sociedade Galega do Medio Ambiente), cuyo capital está en manos de la Xunta (51 %) y Naturgy (49 %), gestiona la basura del 94 % de los concellos de Galicia (295) y del 83 % de la población. El directivo tiene en su casa hasta cuatro cubos para discriminar desperdicios y reciclar.

-¿De Pontevedra a Cerceda todos los días?

-Sí, una hora y diez minutos ida, y una hora y diez vuelta.

-¿Le compensa?

-Este es un puesto momentáneo [su cargo es de libre designación y desde que está en él ya ha conocido a tres conselleiras]. Tengo niños pequeños, con toda su vida en Pontevedra, así que digamos que sí, me compensa.

-Con una inversión de 29 millones en una apuesta innovadora por la planta de Cerceda, me imagino que en la basura hay negocio.

-Nosotros somos una empresa que tenemos que dar un servicio público. Debemos tener beneficios para seguir invirtiendo. Concretamente, 47 millones en los últimos cuatro años, que han ido destinados a mejoras medioambientales. En esta cantidad están los 29 millones de los que hablaba usted. Hemos finalizado la primera fase del proyecto de modernización e innovación (19 millones) con una nueva planta que es la más eficiente de España, y cuando acabemos la ampliación el año que viene será la más eficiente de Europa.

-Repregunto: ¿hay mucho negocio en la basura?

-Nosotros tenemos un socio tecnológico desde el principio, que es Naturgy, y en estos momentos tiene el 49 % del capital. Ellos invierten en Sogama, y el beneficio se destina a inversiones y a fortalecer el balance de la sociedad. No estamos repartiendo dividendos.

-Parte del negocio está en la valorización de los residuos.

-Nuestros ingresos tienen la siguiente procedencia: 40 % de la valorización energética, un 45 % del canon que pagan los municipios y el resto de la valorización material, que es el reciclaje. Con la última inversión vamos a cuadruplicar nuestras tasas de reciclaje. El objetivo es más valorización material y menos vertido. Gracias a ello tenemos uno de los cánones más baratos de España.

-En cuanto a las plantas...

-Tenemos una planta de clasificación de envases, una de clasificación en masa de envases (bolsa negra), otra termoeléctrica. Es una economía circular. De un residuo estamos produciendo energía, concretamente el 12 % de la que se consume en los hogares gallegos.

-¿A quién se la venden?

-A Red Eléctrica. Todo lo que producimos lo vendemos y todo lo que consumimos lo compramos. Nuestra producción alcanza los 516.000 megavatios hora al año. Además, tenemos una planta de cogeneración para el secadero. Allí secamos la materia orgánica para producir el combustible derivado de residuos (CDR). Separamos el aluminio, el acero y el vidrio; después, el CDR lo trituramos en pequeñas cantidades y lo enviamos a la caldera para valorizarlo energéticamente. Conseguimos así que haya menos emisiones: de NOx [óxido de nitrógeno] nos distanciamos en más de un 30 % del máximo permitido.

-¿Hacen compost?

-Hemos hecho una planta de compostaje en el vertedero de Areosa. Pero el compost tiene que venir de una recogida selectiva, que los concellos limítrofes están en estos momentos implantando. Creo que en el último trimestre, o en el primero del año próximo, podremos hacer compost en nuestra planta. Los concellos tienen que implantar el quinto contenedor, el marrón. Luego hacemos valorización material. Realizamos divisiones entre once materiales distintos. Tenemos planta de clasificación del contenedor amarillo, que es el de plásticos, briks y envases. La nueva planta se corresponde con la basura en masa, la del contenedor verde. Hasta ahora solo podíamos separar el aluminio, el acero y el vidrio. A partir de su puesta en marcha separaremos y reciclaremos el plástico y el papel cartón.  

-¿Usted recicla?

-Por supuesto.

¡Claro que reciclo! Tengo cuatro bolsas de reciclaje en mi casa. Tres están en el pasillo

-¿Cuántos contenedores tiene en su casa?

-Cuatro.

-¡Habrá que comprar pisos con la habitación para los contenedores!

-Yo tengo bolsas de plástico, porque no tengo espacio.

-¿Dónde tiene las cuatro bolsas? -Tres en un pasillo que hay entre la cocina y la zona de la plancha y el cuarto es el cubo de toda la vida, el de la materia orgánica.

-¿Qué le da más asco cuando ve algo en la basura?

-[Resopla varias veces mientras piensa]. Ver, como he visto, algún animal que viene en un contenedor o residuos industriales o de construcción que no deberían llegar a nuestras instalaciones. Cuando la gente no contribuye a que Sogama pueda hacer bien su trabajo... Que vengan animales no es agradable. Le puedo decir que viene de todo. Animales, bicicletas, motos. Tuvimos un caso de un bebé. Llamamos a la Guardia Civil y se abrió una investigación. Yo no estaba en ese momento. Hace poco apareció otro bebé en una planta que no era de Sogama. Eso es inhumano [se le cambia la cara. Silencio]. ¡Qué voy a decir!

-Cuando ve que el vecino de enfrente lo está mezclando todo, ¿qué piensa?

-Que es un irresponsable. Tiene que pensar el futuro de sus hijos y de sus nietos. Entre todos tenemos que cuidar el planeta.

-¿Le llama la atención?

-No, a mí no me gusta llamarle a nadie la atención. Somos mayorcitos, tenemos que saber lo que hacemos. Pero me disgusta.

-¿Cuántas toneladas de basura será capaz de tratar Sogama?

-Un millón. Para el 2020 tenemos como objetivo alcanzar el vertido técnico cero, algo que el Estado tiene marcado para el 2035. Significa mandar al vertedero solo lo que no puedas valorizar ni material ni energéticamente. Nosotros en estos momentos estamos en el 28 % de la tasa de vertido que llega al vertedero, frente al 57 % que tiene España. Llegamos con quince años de antelación respecto a lo que nos marca Europa. La planta nueva la podremos controlar (vigilarla, activarla, pararla...) desde un teléfono móvil.

Para el 2020, en Sogama tenemos como objetivo alcanzar el vertido técnico cero

-¿Tiene la sensación de que cuando sale de Sogama huele a basura?

-Hay veces que cuando sopla el viento del norte huele, e incluso a veces llego a Pontevedra y la ropa aún huele a basura, pero es que trabajamos con ella. De todas formas se está invirtiendo mucho dinero en innovar y en que los olores afecten los menos posible.

-Se entiende, entonces

-Sí, sí, sí. No hay problema ninguno. Ya ve que estamos todos sanos y limpios [risas].

-¿Cómo se lleva con los vecinos?

-Bien. En Sogama trabajan 500 personas, en su mayoría de Cerceda, municipio con una de las tasas de paro más bajas de Galicia. Hay otros 500 trabajadores indirectos, la mayoría de Cerceda y Ordes.

-¿Han echado cuentas sobre el número de vecinos a los que Sogama les hace el trabajo de tratar la basura?

-A 2.260.000. Ahora estamos tratando alrededor de 800.000 toneladas. Antes, nuestra capacidad estaba en 550.000, por eso hemos hecho esta ampliación. El objetivo es tratar las 800.000 toneladas que nos llegan al año y, en un futuro, ser capaces de hacerlo con toda la basura que se genera en Galicia. A nosotros nos llegan cada día 2.200 toneladas de residuos. Estamos hablando de 800.000 millones de kilos al año.

-Usted es de derechas.

-Soy de centro, centroderecha.

-Si hay cambio de Gobierno, se supone que peligra en su puesto.

-Soy alto cargo y estoy a disposición del Gobierno que salga. Lo que hoy intento es que la empresa sea 100 % sostenible, viable, respetuosa con el medio ambiente y comprometida con la sociedad.

DNI DE LA EMPRESA

Quiénes son

Recicla y valoriza la basura del 83 % de los gallegos

Facturación

118 millones de euros

Empleados

500 personas

Domicilio social

Cerceda