La Xunta allana el camino para la proliferación de las gasolineras fantasma
ECONOMÍA
La circular de buenas prácticas para la apertura de estaciones de servicio, aprobada el jueves por el Consello de la Xunta, rompe barreras para la instalación de gasolineras automáticas, denominadas fantasma por sus numerosos opositores. Entre ellos sindicatos y organizaciones de consumidores, que las consideran peligrosas porque no hay personal en ningún momento. Muchas comunidades han intentado prohibirlas con normativas finalmente tumbadas por los tribunales. Galicia no es una de ellas, pero las trabas burocráticas eran tales que el hecho es que apenas existen estaciones de ese tipo. Las hay de autoservicio y también automáticas, pero con personal durante unas horas al día.
La guía de recomendaciones, elaborada por la Xunta y la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), insta a los ayuntamientos a que dejen de poner trabas y que aceleren las autorizaciones para la instalación de nuevas gasolineras, sean del tipo que sean, siempre que cumplan la normativa, claro.
La Administración autonómica también modificará el registro de estaciones para que el alta se convierta en un trámite más y no en una autorización como ahora, con lo que se acortarán de forma importante los plazos de tramitación de los nuevos proyectos.
Al fin habrá competencia
La Asociación Nacional de Estaciones de Servicio Automáticas (AESAE) ya se ha apresurado a celebrar la circular aprobada por la Xunta, con la que al fin, asegura, llegará la competencia verdadera al sector de los hidrocarburos. Un objetivo idéntico al que persiguen la Administración autonómica y la CNMC con estas recomendaciones en aras de conseguir bajar los precios de venta al público de los carburantes. En Galicia es más caro repostar casi que en cualquier otro sitio de España.
En la comunidad hay 712 estaciones de servicio, un tercio de las cuales son ya independientes. De estas últimas, y según datos de la Consellería de Industria, 42 abrieron en los dos últimos años, desde que rige el decreto que ya agiliza plazos y trámites para negocios de hidrocarburos.
A la Xunta no le parecen suficientes y quieren que sean muchas más para abaratar precios.