¿Y cuándo retirarse?

La Voz

ECONOMÍA

Los consultados fijan dos tramos: como pronto a los 63 años, y como tarde, a los 66

16 nov 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

La consulta del BBVA revela que la mitad de los jubilados -el estudio se abordó exclusivamente con ellos- están de acuerdo con la edad en la que entraron al sistema público de pensiones. Pero, curiosamente, hay hasta un tercio de los encuestados que habrían preferido hacerlo un tiempo después, prácticamente el doble de los que confiesan que para ellos el retiro llegó tarde.

El documento recoge también la respuesta, múltiple, que hicieron los gallegos cuando se les preguntó si habría que marcar una edad máxima y una mínima para entrar a ese retiro. Hay una amplia mayoría (68 %) que piden fijar un mínimo para todos; pero hasta un 65 % que reclaman que cada cual decida el momento de dejar la actividad.

¿Y cuáles deberían ser los límites? De media, por abajo, los 63,4 años; por arriba, es decir, edad a partir de la cual todo el mundo debería disfrutar de su jubilación, los 66,6. Conviene recordar que la reforma del 2013 estableció un calendario de retraso progresivo de la edad de jubilación, hasta los 67 años; ahora mismo está en 65 años y seis meses.

El recurso de la vivienda

Galicia es un territorio en el que mayoritariamente se tiene vivienda en propiedad, un recurso que les sirve a los jubilados para librarse de un gasto mensual recurrente. Pero, ¿se servirían de esa casa para mejorar sus ingresos? No hay una respuesta clara. La mitad de los encuestados afirman estar dispuestos a vender, hipotecar (la llamada hipoteca inversa, que es venderla y seguir en renta hasta el fallecimiento), o alquilar su vivienda como recurso para mejorar sus pensiones. Los que rechazan esa vía lo hacen, mayoritariamente, porque confiesan que no tendrían otro lugar donde vivir, pero también porque es un bien que quieren dejar a sus hijos o la quieren dejar de herencia. Un apego a la familia que, en este caso, está por encima de la media española.

Los ahorros

Este asunto, el de los recursos durante los años en los que los ingresos llegan vía pensión, es fuente de inquietud para muchos ciudadanos. En la encuesta se explica que el 46 % de los gallegos han tomado alguna medida de ahorro para afrontar la vejez. Se puede ver también al revés: pese a la inquietud por las pensiones, más de la mitad no ahorran para ello. Dicen un 80 % que tampoco lo habría hecho de saber de antemano lo que iban a percibir.