Las pensiones volverán a revalorizarse con el IPC como factor «troncal»

l. p. MADRID / COLPISA

ECONOMÍA

ÁNGEL MANSO

El índice de revalorización de las pensiones que introdujo el Gobierno de Rajoy, que abocaba las prestaciones a ridículas subidas del 0,25 %, es ya pasado

06 sep 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

El Pacto de Toledo ha retomado su actividad parlamentaria con mucho brío tras las vacaciones de verano. Si había pocas esperanzas de que la primera reunión del nuevo curso diera algún tipo de fruto, las expectativas se han superado con creces y el acuerdo sobre la forma de revalorizar las pensiones parece más cerca que nunca: se hará utilizando el IPC como factor «troncal».

Incluso podría ser que el miércoles que viene, fecha para la que está prevista la próxima convocatoria de la comisión, se dé ya carpetazo definitivo a la recomendación segunda, que trata de cómo garantizar el poder adquisitivo de los pensionistas, con lo que se superará el mayor escollo que había entre los grupos parlamentarios, según explicaron este miércoles fuentes cercanas a la negociación. «Tenemos que cerrar este tema ya», defendieron muchas de las partes implicadas. Y es que, a punto de cumplirse dos años desde que la comisión del Pacto de Toledo echó a andar, hay «una clara voluntad para cerrar cosas» y «muchas ganas de superar este estadio».

Existen dos puntos para los que parece haber unanimidad: el índice de revalorización de las pensiones (IRP) que introdujo el Gobierno de Mariano Rajoy de manera unilateral en el 2013 y que abocaba las prestaciones a ridículas subidas del 0,25 % es ya pasado, puesto que «la prioridad ahora es garantizar el poder adquisitivo» de los jubilados. Hasta el propio PP lo ha reconocido. El segundo punto que genera un amplio consenso es que el IPC sea el factor «troncal» para la nueva fórmula de revalorización. Si antes de verano ya había una mayoría de dos terceras partes que apoyaban este método, «hoy somos más», según confirmaron fuentes parlamentarias.

Una semana de plazo

El reto ahora está en conseguir a lo largo de esta semana terminar de redactar un texto con el que «una mayoría se sienta cómoda». «Ha de haber un acuerdo, y si puede ser unánime sería fantástico», apuntaron desde la comisión, recalcando que pelearán por que la recomendación sea «clara» y «todo el mundo pueda sentirse a gusto con ella». Y es que si algo han aprendido es que «no puede pasar lo mismo que en el 2013», pues ha quedado claro que «una reforma unilateral como la del PP no se aguanta», aunque ahora no «harán sangre con ello».

Otros factores

Nadie se opuso en la última reunión a que el IPC se convirtiera en el «elemento troncal». Y la forma en que podría redactarse sería algo así: «Se tendrá en cuenta de manera medular la evolución del IPC», de forma que, en cierta manera y dependiendo de las interpretaciones, se deja la puerta abierta a la matización que pedían introducir PP, Ciudadanos, PDECat y PNV: que en tiempos de crisis puedan entrar en juego otros factores como PIB o salarios para que las pensiones más altas no suban tanto.

Este texto no satisface a Podemos, que defiende que debe plasmarse que «la comisión considera necesario garantizar de forma estructural la revalorización anual de las pensiones con un arreglo al IPC real». «Nosotros queremos en negrita y subrayado; ellos quieren fórmulas mucho más abiertas que les permitan en un momento determinado volver a hacer lo que quieran», se lamentó la portavoz de la formación morada, Aina Vidal.