Primera denuncia gallega contra las empresas de reparto exprés

Manoli Sío Dopeso
m. sío dopeso VIGO / LA VOZ

ECONOMÍA

STEFANO RELLANDINI

Se presenta una demanda ante Inspección en Vigo por falsos autónomos

10 oct 2018 . Actualizado a las 19:21 h.

La guerra declarada por el Gobierno al fraude de los falsos autónomos libra una de sus principales batallas en el sector de la mensajería y el reparto.

Sindicatos y organizaciones de autónomos se suman a la causa que persigue combatir esta fórmula ilegal de vinculación laboral a una empresa. Y en este contexto se enmarca la demanda que el pasado día 2 de agosto presentó en Vigo la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) ante la Inspección de Trabajo, contra las prácticas laborales de la empresa (aplicación) de reparto de domicilio Glovo.

En el texto de la demanda, el sindicato denuncia una vinculación mercantil fraudulenta con los trabajadores. «Todas e cada unha das persoas traballadoras prestan servizo en condicións de voluntariedade, alleidade, dependencia e retribución, elementos claros que definen a concorrencia da relación laboral», dice la central, que reclama la intervención de la autoridad laboral ante la emergencia y proliferación de este tipo de empresas «que sustentan o seu beneficio na explotación das persoas traballadoras».

La aplicación, que permite comprar, recibir y enviar al momento cualquier producto dentro de una misma ciudad, opera en Galicia desde febrero, y solo en Vigo, la ciudad de entrada en la comunidad, cuenta con más de un centenar de socios colaboradores, entre los que están negocios hosteleros, floristerías, farmacias o tiendas de electrónica.

La Inspección de Trabajo ha dictaminado en diversas resoluciones que las plataformas de reparto a domicilio Glovo y Deliveroo encubren una auténtica relación laboral de empleador y asalariado con sus riders (así se identifica a los repartidores) a los que contratan como autónomos.

Glovo tiene 8.000 trabajadores en España y, según las estimaciones del sindicato, si todos ellos cotizaran, la Seguridad Social ingresaría al año cerca de 7,5 millones de euros. Dice UGT, otro sindicato activo en esta causa, que si la Inspección le sancionara, a la vez en todas las provincias, podría superar los 9 millones de euros.

Cinco euros por pedido

Ya hay un precedente, porque Inspección de Trabajo acaba de reclamar a la firma 380.000 euros por el pago de las cotizaciones atrasadas de 326 repartidores en Zaragoza que el organismo considera falsos autónomos.

Pero no es solo Glovo. Las gravosas condiciones de los riders ya han sido sindicadas, en la que algunos empiezan a llamar la lucha obrera del futuro. Manifestaciones y protestas se han repetido en grandes capitales de España, especialmente en Madrid, y las denuncias contra empresas del sector como Deliveroo o Uber Eats han llegado a la Inspección de Trabajo.

La media de ingresos que perciben estos trabajadores autónomos es de cinco euros por pedido. «El sueldo depende del número de repartos y kilómetros que hacen. Y deben costearse el mantenimiento de sus bicicletas, además de la cuota de autónomo», dicen los sindicatos.