El director de la Agencia Tributaria avisa: «Estamos abocados al Gran Hermano»

Gabriel lemos REDACCIÓN / LA VOZ, AGENCIAS

ECONOMÍA

Zipi | efe

El fisco espera recaudar más de mil millones con la tasa Google

09 may 2018 . Actualizado a las 07:09 h.

Hay pocos datos de nuestra vida que no conozcan en Hacienda. Saben dónde trabajamos, cuánto cobramos, el dinero que tenemos en el banco y hasta las oenegés con las que colaboramos. Tal es el caudal de información que maneja la Agencia Tributaria que su director, Santiago Menéndez, reconoció ayer que «estamos abocados al Gran Hermano».

Razones para esa información no le faltan. El fisco maneja herramientas tecnológicas cada vez más sofisticadas, que le permiten rastrear actividades económicas no declaradas. A eso hay que sumar los convenios de intercambio de información con terceros países, que están poniendo coto a los paraísos fiscales, y las nuevas formas de relación con los contribuyentes. El mejor ejemplo, el nuevo suministro inmediato de información para la declaración del IVA, que permite a la Agencia Tributaria acceder casi en tiempo real a las facturas de las grandes empresas -y, a través de estas, a las de muchas pymes-.

Eso sí, Menéndez enfatizó que para que esa relación más «cooperativa» y transparente funcione tiene que estar «perfectamente protocolizada» y regulada. En esta línea, ha hecho hincapié en la importancia de reforzar mecanismos que den seguridad jurídica a las empresas, de forma que, ante una posible disconformidad con el fisco, tengan la garantía de que el criterio que se les aplica es el que marca la institución y no depende de un grupo de funcionarios o inspectores, más allá de que se esté de acuerdo o no con él.

Para muestra, recordó que tres de cada cuatro denuncias por delito fiscal presentadas por la Agencia Tributaria el año pasado terminaron en sentencia condenatoria, mientras que las reclamaciones contenciosas de contribuyentes contra las liquidaciones de impuestos son desestimadas en más de la mitad de los casos.

Impuesto a las tecnológicas

Durante su participación en unas jornadas sobre fiscalidad organizadas por Deloitte, Menéndez fue preguntado por el nuevo impuesto a las tecnológicas que el Gobierno quiere implantar para sufragar el aumento del gasto en pensiones. Para cuadrar las cuentas sobre el papel, y tratar de suavizar los reparos de la Comisión Europea ante una medida que puede alterar la senda de ajuste del déficit, Hacienda elevó hasta 600 millones este año, y más de mil el próximo, las previsiones de recaudación por este tributo. Pero ¿está el fisco en condiciones de cumplir con ese ambicioso objetivo?, le preguntaron a Menéndez. «Pues claro», contestó rotundo.