Los empresarios que emplean a falsos autónomos se exponen a ir a la cárcel

Manoli Sío Dopeso
m. sío dopeso REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

Las sumas no cotizadas que superen los 50.000 euros conllevan hasta 5 años de prisión

08 may 2018 . Actualizado a las 11:19 h.

Ofrecer un empleo a un trabajador autónomo para luego integrarlo en la empresa como si estuviera en nómina es un fraude. Está perseguido y sancionado. Pero sigue ocurriendo.

Tras la demanda de un trabajador por cuenta propia casi siempre hay alguien que prefiere recurrir a esta fórmula para incorporar personal a su negocio porque sale más barato.

Pero cuidado. Desde enero de este año, las sanciones que prevé la ley de infracciones cuando Inspección detecta que uno o más trabajadores no están dados de alta -se considera que, aunque estén afiliados al RETA, no trabajan como autónomos- se han incrementado hasta el punto de que ya prevén penas de cárcel.

Hay distintos niveles de fraude y, según explican fuentes de la Seguridad Social, esta legislación tiene respuesta para todos, y las sanciones, que oscilan entre los 3.000 y 10.000 euros, son especialmente duras con las infracciones más graves.

Delito penal

¿Cómo de duras? «La Seguridad Social podrá reclamar el pago de las cuotas al régimen general hasta de los últimos cuatro años defraudados, con unos recargos que van del 100 al 150 % de dichas cotizaciones no ingresadas. Todo ello por cada falso autónomo que se descubra», explica la Administración.

Pero aún puede ser peor. Esta práctica irregular de contratación puede incluso convertirse en delito penal si la falta de cotizaciones al Régimen General supera los 50.000 euros defraudados en cuatro años, aclaran desde Empleo. Las penas a las que se expone el empresario oscilan entre uno y cinco años de cárcel.

Tener como empleados a falsos autónomos es una manera de engordar plantillas sin cargas sociales. No es un invento de ahora. Pero la novedad es que la aparición de nuevos sectores vinculados con la tecnología, el reparto o los servicios colaborativos están provocando un repunte.

Actualmente existen más de 200.000 personas que desarrollan su actividad profesional en España bajo la figura del falso autónomo, según la Unión de Asociaciones de Trabajadores Autónomos y Emprendedores (Uatae). La Federación de Autónomos (ATA) dice que son algo menos, y rebaja la cifra a 100.000.

En Galicia hay más de 7.000 autoempleados fichados por empresas con sede en la comunidad de forma irregular, a pesar del endurecimiento de las sanciones.

Inspección no descansa

Las compañías con falsos autónomos suelen ser detectadas por la inspección a través de varias vías. «La primera es la acción directa de la propia Inspección de Trabajo de oficio o inducida por una reclamación del falso autónomo», explican desde este organismo.

Además de la intervención del propio autoempleado, otra manera de que la Inspección actúe es el buzón de denuncias anónimas, «llamado así porque el denunciado no conoce al denunciante», aclara. En la página web del Ministerio de Empleo se detallan las tres vías de acceso a este buzón.

¿Qué responsabilidad tiene los autónomos que consiente esta fórmula de empleo? Según la Seguridad Social, hasta ahora eran considerados víctimas, pero también eso puede cambiar. «Un autoempleado que acepta trabajar como falso autónomo tiene que tener en cuenta que a él también se le puede sancionar. Si bien es cierto que, casi siempre, la responsabilidad se les exige solo a los empleadores», afirman desde Empleo.