El remate de viales, las estaciones intermodales y el plan de transporte, principales apuestas en infraestructuras
21 oct 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Poner en valor y mejorar la eficacia y la seguridad de la red viaria construida en los años de bonanza es la principal lectura que ofrecen los presupuestos autonómicos en el apartado de infraestructuras, que centran sus esfuerzos en el desdoblamiento de viales como los de O Morrazo (12,9 millones), en la conexión de vías de alta capacidad como la de San Cibrao das Viñas con la A-52 (5,7 millones) o como la vía Ártabra en el cinturón de A Coruña (4 millones), en la conversión en autovía del vial Nadela-Sarria o en variantes como la de Aradas en Santiago (3,3 millones).
En esa misma apuesta por la movilidad está el empuje a las estaciones intermodales en las siete ciudades gallegas -las más beneficiadas, Ourense y Santiago-, con una inversión total de 7,3 millones, así como el diseño de sendas peatonales y para ciclistas, que se engloban en una partida de 11,6 millones de euros.
El recién estrenado plan de transporte precisará de más inversiones en los próximos años, y, así, las cuentas del 2018 reservan algo más de un millón para estudios y proyectos y 1,4 millones para la puesta en marcha de la central de llamadas para el transporte bajo demanda.
Las partidas más gravosas son las que tienen que ver con los peajes encubiertos que los gallegos pagan vía impuestos por las autopistas y las autovías, una cifra que sigue creciendo año tras año. Si en las cuentas del 2017 se habían consignado 63,7 millones de euros, en las del 2018 se prevé un gasto de 65,5 millones, entre pagos a las concesionarias, cánones de demanda y cánones de disponibilidad.
Suelo y vivienda
Y si en infraestructuras viarias se apuesta por conservar y mejorar lo que existe, la política en el sector de la vivienda es similar, con la rehabilitación en el punto de mira, ya sea con subvenciones a los propietarios para reparaciones (1,6 millones) o para eficiencia energética (2,2) o mediante la compra de edificios abandonados en los cascos históricos para su recuperación a través del programa Rexurbe (6,5 millones). La promoción de vivienda nueva se lleva también 7,1 millones para suelo residencial en San Paio de Navia (Vigo) y una cantidad similar para la construcción de vivienda sociales en A Coruña, Ourense y Vigo. El polígono de Morás, en Arteixo, es la principal inversión de los 7,4 millones destinados a suelo industrial.