Arranca en la Audiencia Nacional el juicio contra la antigua cúpula de Abengoa

La Voz MADRID / EFE

ECONOMÍA

benito ordoñez

El fiscal pide cinco años de cárcel para el expresidente Felipe Benjumea

14 oct 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El lunes arrancará en la Audiencia Nacional el juicio contra la antigua cúpula de la multinacional Abengoa por las indemnizaciones millonarias recibidas por el expresidente de la compañía Felipe Benjumea y su ex consejero delegado, Manuel Sánchez Ortega. La Fiscalía pide para ellos cinco años y cuatro años y tres meses de prisión, respectivamente, como presuntos autores de un delito de administración desleal, cargo que también pesa sobre tres miembros de la comisión de nombramientos y retribuciones.

Se trata de quien fuera presidenta de ese organismo, Mercedes Gracia, y dos de sus consejeros Alicia Velarde y Antonio Fornieles, que se enfrentan a peticiones de entre tres y cuatro años y medio de cárcel por el mismo delito. Quien no está encausado es el exministro socialista Josep Borrell, que también era miembro de esa comisión pero que alegó que no estuvo presente en la reunión del consejo de administración que finalmente aprobó dichos pagos. Por ello, el político solo acudirá al juicio como testigo.

En el auto de procesamiento, la jueza Carmen Lamela puntualizaba que ni Benjumea ni Sánchez Ortega se desvincularon totalmente de Abengoa, ya que un mes después de dejar su cargo, este último firmó un contrato de prestación de servicios por el que seguiría cobrando la remuneración que le correspondería como consejero delegado. Por lo que respecta a Benjumea, fue nombrado consejero dominical y presidente no ejecutivo en la misma reunión en la que fue cesado, cargos por los que recibiría una retribución bruta anual de 1.086.000 anual y mantendría su cotización a la Seguridad Social.

Estos vínculos suponen, para la jueza, que la relación contractual de ambos «no se había extinguido», por lo que no cabe aceptar que tuvieran que recibir indemnización alguna.

Al contrario, dice que de lo que se trató es de que «Benjumea recibiera una cantidad de dinero extremadamente importante, máxime en un momento tan delicado por el que pasaba Abengoa, poco antes del preconcurso de acreedores».