El cerco de Empleo empuja al cierre a nuevas cooperativas de facturación

Ana Balseiro
Ana Balseiro MADRID / LA VOZ

ECONOMÍA

Organizaciones de autónomos critican la demora del ministerio en actuar

23 ago 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El Ministerio de Empleo anunció en junio la puesta en marcha de un plan para revisar la legalidad de las cooperativas de facturación. Lo hacía ante su auge en los dos últimos años y tras las denuncias de las organizaciones de autónomos que sostienen que, en el mejor de los casos, operan al límite de la legalidad. El cerco de la inspección de la Seguridad Social, que comenzó a investigar a las plataformas a través de las que expiden sus facturas trabajadores freelance -que no tienen una actividad continuada ni ingresan suficiente como para cotizar como autónomos- se ha traducido ya en varios anuncios de disolución. El último, este martes, con el comunicado de cese de actividad que Cooperativa Online remitió a sus asociados: «Las últimas noticias sobre nuestro tipo de sociedades y la reciente resolución del Ministerio de Trabajo sobre Factoo nos obliga a hacer una reflexión profunda sobre nuestro modelo de trabajo, de relación con los socios, y en definitiva sobre todos los aspectos de Cooperativa Online», explican

Esta organización asegura que que no están siendo investigados, ni han recibido ningún requerimiento de información sobre sus socios. Sin embargo, sobre este último aspecto, fuentes consultadas han asegurado que algunos cooperativistas sí han comenzado a recibir los avisos de sanción.

Cese preventivo de la actividad

En cualquier caso, Cooperativa Online ha decidido, de forma preventiva y «ante las indeterminaciones actuales», no continuar con su actividad, por lo que este martes anunció a los socios que no emitirá facturas por nuevos trabajos, mientras que todas las pendientes «se cobrarán y liquidarán con normalidad», aunque no harán nuevas al altas y bajas en la Seguridad Social. Igualmente informó que los que lo soliciten serán dados de baja y se les devolverán los 80 euros que hicieron como aportación al capital social.

La firma, que insiste en que nació para dar un soporte «cercano, honesto y transparente» a sus asociados, se suma así a la disolución de la granadina InPulse, una cooperativa de impulso empresarial creada hace cuatro años y orientada a los profesionales vinculados con el mundo de la cultura. La andaluza anunció hace unas semanas que se veía abocada a disolverse por la «inseguridad jurídica» creada, después de que el 29 de junio se les abriera una inspección para «estudiar el encuadramiento de la entidad en el sistema de Seguridad Social». Sostienen que, dada su modesta facturación y estructura, una eventual sanción les obligaría a declararse en concurso, por lo que han optado por disolverse como mejor opción, aunque la inspección no ha concluido.

Las cooperativas defienden que las ampara la normativa autonómica y que su funcionamiento se ajusta a la legalidad, y denuncian un «énfasis político» tras las órdenes del ministerio.

Sin embargo, las organizaciones de autónomos creen que la decisión de Empleo de descalificar a Factoo como cooperativa es la correcta. «No podemos dejar puertas abiertas a la ilegalidad», señala el secretario general de UPTA, Eduardo Abad, que sostiene que estas plataformas «vulneran la normativa y no se puede consentir que prolifere ese tipo de economía, que no es colaborativa, y que compite de forma desleal con las empresas y los autónomos que realizan su actividad legalmente». Desde ATA, su presidente, Lorenzo Amor, coincide en reclamar regulación y lamenta el retraso de Empleo en actuar.