Así es el día a día de Gayoso tras una semana en Érguete

e. v. pita VIGO / LA VOZ

ECONOMÍA

Sirve desayunos y busca ayudas en Internet para la ONG; «está muy satisfecho», dice Carmen Avendaño

17 ago 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El exbanquero Julio Fernández Gayoso, condenado a dos años de cárcel como cooperador necesario en una apropiación indebida por las millonarias indemnizaciones en Novacaixagalicia, cumple hoy su primera semana de trabajos sociales en la asociación de ayuda al toxicómano Érguete. Gayoso, de 85 años, inició su actividad el pasado jueves, tras un permiso penitenciario, aunque el primer día fue de cortesía y sus supervisores le hicieron las presentaciones y le explicaron el funcionamiento del centro.

El viernes comenzó a servir desayunos a medio centenar de extoxicómanos que acuden a Érguete a formarse en talleres ocupacionales para reintegrarse en la vida laboral. «Echa una mano a otras dos personas en los desayunos, él les ayuda», relata la portavoz de la organización, Carmen Avendaño.

Quien fue presidente de Caixanova y de Novacaixagalicia (tras la fusión con Caixa Galicia) pasa el resto de la jornada en la oficina buscando en la Red convocatorias de ayudas para que los exreclusos o jóvenes desenganchados de la droga encuentren empleo. «Pasa tiempo en Internet, explorando en busca de convocatorias que puedan ser útiles para nuestros usuarios», comenta Avendaño. En sus mañanas en Érguete, Gayoso también ha asistido como oyente a cursos formativos y ha conocido a los alumnos que aprenden un oficio práctico en los talleres de esta ONG.

Fernández Gayoso también hizo esfuerzos para ponerse al día en cuanto a los programas de reinserción laboral de reclusos y extoxicómanos, caso de Reincorpora, Incorpora, Itinere, Abeiro, Alén y otros. Los alumnos aprenden profesiones como limpiador de cristales o de superficies de inmuebles, peón de jardinero, teleoperador, ayudante de cátering o de panadería, y otros trabajos en industria, textil y autoempleo.

Durante su estancia, el exdirectivo bancario también ha revisado las memorias anuales publicadas por la Fundación Érguete para conocer los programas y talleres del centro para evaluar dónde obtener financiación para ellos. En este sentido, desde Érguete confirman que se puso en contacto con varios departamentos a fin de hablar de cómo localizar las convocatorias de ayudas.

Bajo control

En Érguete destacan el buen trato de Gayoso con los compañeros, que le han informado de cómo funciona el centro. «Está muy a gusto aquí, es una persona discreta, se encuentra muy satisfecho y echa una mano a los compañeros», dice Avendaño. El exfinanciero debe cumplir año y medio de jornadas de trabajos sociales, lo que le resta de condena. El Centro de Inserción Social controla con una pulsera telemática que duerma en su casa en el horario penitenciario establecido.