Crece la riqueza por habitante en Galicia, pero aún es 2.600 euros menor que en España

Rubén Santamarta Vicente
r. santamarta REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

MARCOS MÍGUEZ

La cifra es positiva, pero hay que contextualizarla: obedece «tanto al mayor dinamismo económico como a la caída de la población»

15 ago 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El crecimiento de la economía gallega el año pasado, por encima del 3 %, ha permitido que esta fuera la comunidad en la que mas aumentó el PIB por habitante, un buen barómetro para comparar el pulso de cada territorio en esta salida de la crisis. La riqueza media por gallego -que no renta disponible, que es otro concepto- alcanzó el año pasado los 21.358 euros, un 4,3 % más que en el 2015, y nueve décimas más de la media de las comunidades españolas.

La cifra es positiva, pero, según explica el informe del Consejo Económico y Social, hay que contextualizarla: obedece «tanto al mayor dinamismo económico como a la caída de la población». Y recuerda que las diferencias territoriales siguen siendo elevadas. Galicia, pese a esa subida anual (casi mil euros por habitante), sigue estando lejos de converger con la media de España en riqueza, que está ahora cerca de los 24.000 euros por habitante. Es decir, 2.600 más que la media gallega. Se queda 11 puntos por debajo y en una discreta novena posición. Con todo, se puede ver el vaso medio lleno: con ese crecimiento del 4,3 % en un ejercicio adelanta a Valencia y a Asturias, que ahora tienen un peor comportamiento en este indicador. Pero está aún 5.000 euros por debajo de un aragonés; o un 50 % menos que un madrileño o un vasco, que repiten al frente del reparto. 

Por sectores

¿Y en qué se ha asentado la subida en Galicia? Sobre todo, en el crecimiento de dos sectores: los servicios (comercio y hostelería), que aportan el 20 % del PIB tras crecer un 5 % en un ejercicio, uno de los mayores tirones entre las regiones españolas; y la industria, que sube un 3,2 % y supone el 18 % de la economía gallega; este sector gana algo más de peso en la economía, y eso es reseñable. Si se le suma la Administración pública, se alcanza ya la mitad de lo que genera Galicia al año. Por detrás, la construcción y las actividades inmobiliarias, que repuntan tras años de caída.