Galicia aportó tres de cada diez nuevos empleos creados en España en julio

G. Lemos REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

MARCOS MÍGUEZ

La hostelería es el sector que más tira del mercado laboral, con seis mil afiliados más

03 ago 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El arranque de la temporada alta del turismo en Galicia, siempre más tardío que en la costa mediterránea, convirtió a la comunidad en motor de la creación de empleo en España en julio, con 16.721 nuevos puestos de trabajo (de los declarados, claro). Tres de cada diez de los 56.222 afiliados que se dieron de alta en la Seguridad Social el mes pasado lo hicieron en empresas gallegas.

Datos que solo mejora Cataluña, donde se crearon casi 24.000 empleos (aunque el tamaño de su mercado laboral triplica el gallego, con 3,3 millones de trabajadores, frente a los 996.598 que registró de media Galicia en julio). Si se mide en términos relativos, el estirón del mercado laboral en Galicia fue el tercero mayor del país, con un alza de la afiliación del 1,71 %, menor a la experimentada en Cantabria (2,83) y en Baleares (2,22), pero muy por encima de la media nacional, de apenas un 0,31 %.

Las contrataciones de última hora en hoteles, bares y restaurantes hicieron de la hostelería el sector que más contribuyó a la mejoría del empleo en Galicia en julio, con más de seis mil nuevos trabajadores, entre asalariados y autónomos. Dobla casi las cifras de las empresas sanitarias y de servicios sociales (3.330 afiliados más) y de los comercios (3.175), los dos sectores más pujantes en el resto de España (entre ambos suman casi 95.000 empleos, frente a los 40.000 en la hostelería).

Donde no hay diferencia es a la hora de señalar la actividad que más lastra el repunte de la afiliación. Es la educación, ya que tras el fin del curso escolar se destruyeron 93.350 puestos de trabajo, 4.300 de ellos en Galicia. 

El paro cae cinco veces más

La intensa creación de empleo en julio se tradujo en una fuerte caída del paro registrado. De hecho, Galicia fue la comunidad donde las oficinas del antiguo Inem tramitaron más bajas el mes pasado. Fueron 7.794, lo que supone una caída del 4,11 % respecto a junio (cinco veces más que la media española, del 0,8 %). Solo Cantabria, con una reducción del 6,5 %, presenta un ajuste mayor.

Eso sí, es la menor caída del paro en un mes de julio en la comunidad de los últimos ocho años. En el 2016 se dieron de baja dos mil demandas de empleo más, y hay que remontarse al 2009 para encontrar un dato más bajo, lo que no es necesariamente malo, ya que apunta a la normalización del mercado de trabajo tras años de crisis. De hecho, la cifra de parados en julio (181.871) es la más baja desde diciembre del 2008.

La principal sombra en la recuperación del mercado de trabajo sigue siendo la precariedad del empleo que se crea. En la comunidad se firmaron 107.578 contratos en un mes (es decir, hacen falta más de seis contratos por cada nuevo afiliado), un 8 % más que en julio del 2016. Y, aunque es cierto que los indefinidos crecen más que los temporales (11 frente a 8 %), estos últimos siguen siendo la inmensa mayoría, ya que casi el 94 % de los contratos firmados en Galicia tienen fecha de caducidad definida, dos puntos más que en el resto de España.

La Xunta invertirá 3,5 millones de euros para insertar en el mercado laboral a 500 parados menores de 30 años

La Xunta ultima un nuevo programa para fomentar la contratación de jóvenes sin empleo, a través de la formación y los incentivos a la contratación. El plan, pendiente de aprobación en el Consello de la Xunta, traerá aparejada en esta primera fase una inversión de 3,5 millones de euros, financiados a través del Sistema de la Garantía Juvenil (que a su vez se nutre de fondos europeos). Una cantidad con la que la Consellería de Economía, Emprego e Industria espera beneficiar a 500 parados menores de 30 años, que podrán mejorar su cualificación y acceder a un trabajo en dos de los sectores estratégicos de la economía gallega: la industria 4.0 y el agroalimentario.

En total, se ofrecerán ayudas de 7.000 euros por cada participante en esta experiencia piloto. Para garantizar la mejora de la cualificación profesional, la Administración autonómica ofrecerá un bono de 2.000 euros para costear una formación que se impartirá en las propias empresas, para que el aprendizaje se adecúe a las necesidades concretas del empleador y a las características del puesto ofertado.

Luego habrá un segundo bono, este de 5.000 euros, para incentivar la contratación en empresas cuyas líneas de negocio estén vinculadas a la innovación tecnológica e industrial o al sector agroalimentario. Esos contratos deberán tener una duración mínima de 12 meses y serán un requisito sine qua non para poder acceder al pago de la formación.

Este nuevo programa forma parte de la Axenda 20 para o Emprego, la hoja de ruta diseñada por el Gobierno gallego para impulsar la creación de empleo, que incluye otras iniciativas como las unidades formativas, que en una primera fase implicarán a cuatro empresas (Coren, Coasa, Exlabesa y Previsonor) que formarán a 130 personas, principalmente desempleados, con el compromiso de contratar al menos a 84 de ellos al término del programa. En este caso no hay topes de edad para los participantes.

El objetivo de ambas iniciativas es identificar nuevos nichos de empleo y ayudar a preparar a los profesionales en los sectores que precisen de más especialización. Además, se busca fijar población juvenil ofreciendo nuevas oportunidades laborales.

Según la última EPA, en Galicia hay 43.900 parados menores de 30 años, 13.300 menos que un año antes. Más de la mitad (22.500) se concentran en el tramo de edad entre los 25 y los 29 años y hay más hombres (53 %) que mujeres.

Los 20 millones de cotizantes, la meta que se marca Rajoy

Animado por los buenos datos de afiliación, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, insistió en que si se mantiene la tendencia actual se podrá alcanzar en el 2019 la meta de los 20 millones de ocupados que había antes de la crisis (ahora hay 18,5 millones). Sin embargo, la secretaria de Empleo de CC.OO., Lola Santillana, apuntó al menor incremento de la afiliación en un mes de julio desde el fin de la crisis y su homóloga de UGT, Mari Carmen Barrera, puso el acento en que solo el 4,7 % de los contratos son indefinidos a tiempo completo, informa Colpisa.