La Xunta «trabaja» con Bimba y Lola para amarrar su crecimiento en Galicia

Manoli Sío Dopeso
M. Sío Dopeso VIGO / LA VOZ

ECONOMÍA

IAGO GARCÍA

La firma, que negocia suelo en Valença, dice que su primera opción es quedarse

11 jul 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Más de 1.000 empleos directos, y una aportación fiscal de 23 millones en Galicia son dos buenos argumentos para intentar amarrar la sede de Bimba y Lola en Galicia.

Pero, además, la multinacional de moda y complementos tiene entre manos un potente plan de inversión para crecer y hacer frente a la pujante demanda internacional, todo un caramelo relleno de puestos de trabajo, de riqueza e ingresos al que la Xunta de Galicia no está dispuesta a renunciar.

Bimba y Lola, que tiene su sede en Mos (a 15 kilómetros escasos de Vigo), ha pedido suelo, condiciones y precios para su proyecto en distintas zonas de la provincia de Pontevedra, pero también lo ha hecho en Valença do Minho (Portugal), a menos de 30 kilómetros de su actual sede.

En el norte luso, la joven firma, que está dirigida por las hermanas Uxía y María Domínguez, ha encontrado gran receptividad por parte de la Cámara Municipal de Valença, que ha puesto a su disposición suelo disponible a menos de 20 euros el metro cuadrado y el compromiso de aprobar un plan de incentivos y bonificaciones fiscales a medida, una estrategia habitual por parte de las corporaciones locales portuguesas para captar la implantación de empresas.

«Venimos trabajando con Bimba y Lola desde hace meses», dicen en la consellería

La amenaza de deslocalización o, al menos, del desvío del proyecto de expansión a suelo luso existe. La Xunta de Galicia es plenamente consciente del riesgo y conoce al detalle el proyecto. «Estamos en contacto y hablando con Bimba y Lola desde hace tiempo», afirman desde la Consellería de Economía e Industria, que ha situado las conversaciones en el ámbito en el que se suele actuar en estos casos. «Venimos trabajando con Bimba y Lola desde hace meses como lo hacemos con cualquier otra empresa interesada en crecer, o igual que se trabaja por una nueva implantación en Galicia», se limitaron a aclarar desde el departamento que pilota Francisco Conde.

Llamada para desbloquear

Desde la Xunta no han querido confirmar ni desmentir que la Administración gallega se pusiera ayer en contacto con la multinacional textil para tratar de desbloquear la implantación de ese proyecto de crecimiento en Galicia y evitar su deslocalización.

La firma, vinculada a la familia Domínguez (Textil Lonia, Adolfo Domínguez), anunció el pasado mes de marzo que buscaba nuevos terrenos para hacer frente a su rápido crecimiento.

En ese momento, la empresa manifestó que su plan de expansión requería una nueva sede para los servicios centrales y otras instalaciones logísticas para crecer globalmente y que era intención de la compañía mantenerse en la provincia de Pontevedra, como hasta la fecha.

Ayer, la compañía, que en todo momento ha dicho que está en búsqueda y negociaciones, «pero no hay nada cerrado en firme», insistía en su mensaje inicial: «Galicia sigue siendo la primera opción».

En los últimos meses, la joven multinacional textil ha pedido suelo, condiciones y precios en distintas zonas de la provincia, entre otras, en el polígono de Porto do Molle, en Nigrán, gestionado por el Consorcio de la Zona Franca de Vigo.