Un operador gallego lleva a una petrolera ante Competencia por abuso en los precios

r. s. REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

ALEXIS REY

Es el primer caso que se traslada a Madrid por el impacto de las tarifas impuestas a las gasolineras

01 jul 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Galicia tiene desde hace años el dudoso honor de encabezar la lista de los carburantes más caros de España. Es algo que afecta directamente al bolsillo de los consumidores, pero también a muchas estaciones de servicio, atadas a las condiciones marcadas por sus suministradores, las grandes petroleras. Un operador gallego, en este caso una gasolinera de Betanzos, ha llevado primero ante el Consello Galego de Competencia, y después ante la Comisión Nacional de Mercados y Competencia (CNMC), un caso de abuso en los precios marcados por uno de los grandes operadores: Cepsa.

Otras estaciones de servicio estudian acudir a los juzgados por el mismo problema, pero es la primera vez que una gasolinera gallega da este paso ante Competencia, órgano cuya dirección se comprometió ante Feijoo hace unas semanas a revisar el caso del precio de los carburantes en Galicia.

En la reclamación interpuesta por esta estación -que en las últimas semanas ha cambiado de proveedor a Valcarce-, se argumenta que el contrato de servicio de carburante se hacía a unos precios que impedían al establecimiento competir con otros de su entorno, sobre todo con los low cost, con un trastorno económico que, según el informe de una auditora externa, roza los 80.000 euros (77.800 en concreto) en apenas 20 meses, de mediados del 2014 a inicios del 2016.

El coste aplicado por la petrolera «supone una merma a la capacidad competitiva de la estación de servicio, en cuanto que obliga a reducir sus márgenes para adaptar los precios a los de sus competidores en su área de influencia y estableciendo una limitación a la reducción del precio final de venta al consumidor», se lee en el informe con el que se justifica la denuncia.