«Da venda de leite en exclusiva non podería vivir»

Dolores Cela Castro
dolores cela LUGO / LA VOZ

ECONOMÍA

OSCAR CELA

Rosa Neira Castro tomó en septiembre el relevo en la ganadería familiar en Santiago de Saa (Lugo)

14 mar 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Rosa Neira Castro lleva al frente de la granja familiar de Outeiro, en Santiago de Saa (Lugo), desde el mes de septiembre, cuando se jubiló su padre. Se trata de una explotación de leche de 60 cabezas, de las que 35 están en ordeño.

La ganadera no se lo pensó dos veces cuando tuvo la oportunidad de asumir el relevo generacional, porque es una profesión que le gusta desde siempre y con la que no perdió nunca el contacto. Se crio entre vacas y sabe lo que se trae entre manos, aunque reconoce que no son tiempos buenos para el sector.

La desaparición de las cuotas afectó muy negativamente a esta granja lucense, explica Neira Castro. Según comenta, la industria a la que le venden la leche, que tiene su sede en Burgos, estableció un límite en las entregas, tomando como referencia la campaña 2014-2015, que para la explotación no fue buena, sino más bien todo lo contrario.

En la última campaña, según la productora, les está yendo bastante mejor, pero la industria les rebajó hasta 500 euros el recibo de la leche por excederse en la producción comprometida en contrato, que a efectos prácticos suponía en realidad una cuota, aunque inferior a la última que estuvo vigente en esta granja.

«Agora firmei outro contrato novo -dice- e déronme unha maior capacidade de produción. Confío en que nos vaia mellor porque a campaña pasada foi horrible». «Polo leite estamos cobrando menos que nunca, aínda que a nosa industria non anda xogando co prezo como fan outras. Con todo e iso, non chega a 30 céntimos o litro», se lamenta.

Según relata esta ganadera lucense, «da venda de leite en exclusiva non podería vivir. Do que vendo vou sacando un soldo para min. O meu marido traballa fóra e o meu pai xa cobra unha pensión».