Los concesionarios gallegos facturan 1.260 millones en un año récord

Manoli Sío Dopeso
m. sío dopeso REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

Entrega de un vehículo recién comprado en un concesionario Peugeot de Vigo.
Entrega de un vehículo recién comprado en un concesionario Peugeot de Vigo. XOAN CARLOS GIL

La red comercial cierra el 2016 con 40 millones más en caja que el pasado ejercicio

27 dic 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

La venta de coches vuelve a ser un buen negocio. La recuperación económica ha devuelto brillo y esplendor a unas cifras de facturación que, a pocos días de que finalice el 2016, serán récord en la comunidad gallega.

No es que el mercado haya recuperado a los niveles de su época gloriosa (años 2007 y 2008). Pero el actual ejercicio será el de mayor facturación del sector porque se cerrará con los mejores resultados de ventas de la época poscrisis, y también porque el precio de los vehículos, a pesar de los descuentos, no ha dejado de encarecerse.

Según el balance provisional de Faconauto, la patronal de los concesionarios españoles, la red comercial gallega llegará al cierre del año con 1.260 millones de caja, 40 millones de euros más que el año anterior. Tenía que ser así porque a lo largo del 2016, y a falta del cómputo del mes de diciembre, en Galicia se han vendido 37.633 turismos y todoterrenos, un 6,8 % más que en el 2015 (que ya entonces fue la mejor cifra desde la crisis), y a pesar de que la segunda mitad del año no ha contado con las ayudas del agotado plan PIVE.

Secuelas de la crisis

Faconauto pronostica que se cerrará el 2016 con una rentabilidad de un 1,5 %, frente al 1 % obtenido en el 2015.

Este repunte del mercado sitúa a Galicia entre las cinco comunidades más potentes del mercado del automóvil, con algo más de 6.000 empleados y 170 puntos de venta de vehículos.

El perfil del sector gallego se caracteriza por su creciente concentración, ya que una decena de empresas, lideradas por los grupos Pérez Rumbao, Louzao y Breogán, tienen más del 40 % de la cuota de mercado.

Por el momento, la patronal de concesionarios está satisfecha con los resultados del 2016 y considera que la «crisis ha quedado aparcada», aunque aún no la da por enterrada, sobre todo porque durante ese período se han perdido 1.300 concesionarios en toda España.

La patronal de los vendedores avanza que el 2016 se despedirá con un volumen de matriculaciones de alrededor de 1.157.000 automóviles y 173.000 comerciales ligeros, «con lo que se llega a las 1.330.000 unidades, y podremos decir que se ha alcanzado la ansiada velocidad de crucero».

¿Qué pasará en el 2017? Desde Anfac, la patronal de los fabricantes de coches, no ocultan su preocupación por la falta de incentivos. Este lobby oficialmente registrado como tal en la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ya ha instado al Gobierno a no dormirse. Anfac ha pedido al ministro De Guindos que continúen los planes orientados a la renovación del parque nacional que frenen el envejecimiento, con incentivos a vehículos de bajas emisiones y con energías alternativas.

Donde los datos comienzan a ser algo negativos es en la actividad que ejercen los concesionarios en la posventa. Aunque se reparan más de 15 millones de coches al año, la actividad de los talleres oficiales se está viendo mermada por el envejecimiento del parque automovilístico, una situación que desvía las reparaciones hacia los talleres no oficiales.

Diciembre, el mes de las ofertas y las automatriculaciones

Este año que llega a su fin ha sido positivo para el sector automovilístico. Más de 37.000 gallegos han comprado un vehículo nuevo y, quienes todavía no lo han hecho, aún están a tiempo de materializar una buena operación, porque diciembre es el mejor mes para conseguir una buena oferta.

La explicación es sencilla: los concesionarios quieren concluir el ejercicio con el mayor número de matriculaciones posible, cumpliendo con los objetivos de ventas fijados por la marca.

Alcanzar esas metas es importante para la red comercial porque están ligadas a ciertas ventajas, como descuentos por volumen de ventas o bonificaciones de proveedores y financieras.

«Además, diciembre suele ser un mes flojo en ventas. Nuestro presupuesto ya tiene bastante con la Navidad y los juguetes. Los coches no son un regalo habitual. De hecho, es de los cuatro peores meses del año junto a enero, agosto y septiembre, lo que nos permite apurar las negociaciones a la hora de conseguir el máximo descuento posible», explican fuentes de los concesionarios.

Rebajas de fin de año

A la espera de los últimos clientes del año, las automatriculaciones son una de las soluciones que tienen los concesionarios oficiales para llegar a los objetivos que las marcas les imponen mes a mes.

Los coches, una vez matriculados, pierden valor y se tienen que vender a un precio más asequible. Esa es la gran ventaja para los consumidores que esperan a estos últimos días, aunque para el concesionario, la rentabilidad por unidad vendida disminuye.

Fuentes del sector reconocen que, debido al estancamiento de las ventas que está teniendo el canal de clientes particulares por el fin del plan PIVE, los concesionarios están volviendo a matricular coches a un ritmo mayor del que lo estaban haciendo en años pasados. Según diversas asociaciones profesionales del sector, estas se están situando en los mismos niveles del 2010.

Durante el pasado año los establecimientos españoles matricularon un total de 112.200 unidades. Esta cifra representa un 11 % de las ventas totales de vehículos nuevos que se llevaron a cabo durante el año 2015. Si las previsiones realizadas por estas asociaciones no se desvían mucho, es más que probable que este año las matriculaciones hechas por la marca vendedora vuelvan a suponer entre un 10 y un 12 % de las ventas totales del ejercicio.