Tras el de Monte dei Paschi llegará la nacionalización de otras pequeñas entidades financieras
24 dic 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Con la autorización para que el Tesoro se convierta en el principal accionista del banco Monte dei Paschi, el Gobierno de Italia ha dado el primer paso para nacionalizar parte de su complejo sistema financiero. Después de que el Parlamento le autorizara a disponer de 20.000 millones para salvar al sector, el Ejecutivo presidido ahora por Paolo Gentiloni ha comenzado a actuar para evitar la quiebra de una buena parte del sistema.
La medida cuenta con el apoyo de las autoridades europeas, conscientes desde hace tiempo del problema al que se enfrentaban los bancos italianos. En el caso de Monte dei Paschi, aún no se ha aclarado cuál será la cantidad final que el banco reciba en concepto de rescate, pero los responsables del Ejecutivo han anticipado que «será suficiente» para satisfacer los requisitos para superar la prueba de esfuerzo. A partir de ahora, el banco tendrá que solicitar oficialmente ese salvavidas, adaptándose a las nuevas directrices del Banco Central Europeo (BCE) en materia de rescates públicos. La decisión no puede demorarse porque el plazo legal vence el 31 de diciembre y, además, la entidad ha reconocido que solo le queda liquidez para cuatro meses.
La crisis de Monte dei Paschi se ha visto agravada esta semana cuando su consejo de administración ha certificado la imposibilidad de conseguir los 5.000 millones que necesitaba para realizar una ampliación de capital que le permitiera salir a flote. Los inversores, liderados por el fondo soberano de Catar, se han ido desentendiendo de la operación ante las dificultades por las que pasa tanto el propio banco como por el contexto político que vive Italia tras el no al cambio constitucional refrendado en la consulta del pasado día 4 de diciembre.
Aparte de par salvar a la entidad toscana -la más antigua del mundo, al datar de 1472-- la autorización del Gobierno para intervenir en la banca permitirá la nacionalización de otras pequeñas entidades que se encuentran en riesgo. Se trataría de firmas como Popolare Vicenza, Veneto Banca, Carige y oros cuatro que se encuentran en curso de recuperación: Popolare de Etruria, Carife, Carichieti y Banca delle Marche.