¿Patrimonio? No se sostiene

Venancio Salcines
Venancio Salcines LA POLÍTICA TRIBUTARIA

ECONOMÍA

17 sep 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

En España hay algo más de medio millar de personas que tienen un patrimonio superior a 30 millones de euros y unas 6.500 quinientas con más de 6 millones. Si nos centramos en aquellos que mueven entre un 1,5 y 6 millones, el número asciende a 50.000. Es decir, tenemos unas 60.000 personas que, a juicio de la mayoría, no son clase alta, sino lo siguiente. ¿Qué hacemos? ¿Vamos a por ellos estilo Robin Hood, y con lo sustraído asumimos una parte de los gastos del estado de bienestar? ¿Los dejamos en paz? ¿O los observamos como una oportunidad e intentamos que su patrimonio se convierta en palanca de crecimiento? Supongo que alguno pensará «lo que sea más justo». Y aunque la justicia no existe, es un convenio social, como en más de una ocasión nos recordó el Nobel Amartya Sen, sí tenemos valores de consenso, tantos como para crear cuerpos jurídicos aceptados por la mayoría. Y, desde luego, lo que no es lógico es obligar a alguien a pagar dos veces por algo y esto es lo que haríamos si sometiéramos a tributación nuestro patrimonio. Es imposible que usted tenga a título personal cualquier bien sin antes haber pasado por renta o sucesiones. Por tanto, en su día ya ha hecho su aportación. ¿Otra vez? Pues sí, pensará alguno. Y si hubiera gastado todo lo que he ganado en los casinos y mi herencia la hubiera dilapidado en noches o días de alegría efímera, ¿qué impuesto de patrimonio pagaría? Ninguno.

Es evidente que este tributo al patrimonio no se sostiene. Otra cosa es que necesitemos dinero para el erario público y haya que vestir el santo. Bien. Pues si así fuera, lo que no podemos tener es un país dálmata, en donde si caes en un lugar es negro y en otro blanco. Si deseamos tener presión fiscal efectiva, hemos de tener homogeneidad en todo el Estado y si no la hay, toca repensar y mucho lo que haces en tu casa, porque mudarte de domicilio fiscal puede ser complejo para usted y para mí, pero para esas 60.000 personas, no.