PSA obliga a la automoción gallega a desdoblarse entre Portugal y Marruecos

Manoli Sío Dopeso
m. sío dopeso VIGO / LA VOZ

ECONOMÍA

AFP

Un primer grupo de proveedores busca sitio en Kenitra, junto a la futura planta de la gala. Al igual que el país vecino, el africano ofrece ventajas fiscales y salarios bajos

14 sep 2016 . Actualizado a las 17:22 h.

La industria gallega de componentes del automóvil ha reducido su dependencia del grupo PSA en los últimos años, hasta situarla por debajo del 50 % del total de su producción. Pero la multinacional francesa está fuerte. Se ha venido arriba en los dos últimos años, gracias al empujón propinado por el portugués Carlos Tavares, y situarse en su entorno es garantía de trabajo y de futuro para el sector.

Lo saben bien la treintena de proveedores de la matriz gallega que en los últimos años han implantado filiales en Portugal, para competir en costes, tal y como exige la multinacional francesa para salir beneficiados en el reparto de componentes de los nuevos modelos adjudicados a Vigo: la nueva gama de furgonetas Citroën, Peugeot y Opel, en el 2017; y un nuevo todocamino de Peugeot en tres versiones en el 2020.

Pero el objetivo de la automoción gallega también apunta a Marruecos. PSA quiere que al menos el 50 % de las piezas y los componentes de su nueva fábrica, que debe estar operativa en el 2019, se suministren desde Kenitra, el lugar elegido para la implantación de su nueva fábrica en Marruecos.

Un primer grupo de proveedores gallegos ya están haciendo números y han comenzado a buscar suelo en el entorno de la futura planta marroquí de PSA. Situarse allí es la mejor garantía para los proveedores de ciertos tipos de piezas que solo se pueden surtir en proximidad.

Las incursiones en suelo marroquí se localizan en la Zona Franca de Tánger (Tánger Free Zone), en donde hay un millar de grandes multinacionales instaladas, la mayoría de ellas arrastradas por la planta de Renault, donde el fabricante galo produce su marca económica Dacia.

Primera incursión

Allí está también desde hace casi 5 años Viza Tánger, filial del vigués Grupo Viza, que fabrica armaduras de asientos para todos los modelos Dacia; el grupo Hispamoldes, especializado en moldes de inyección de plástico; y también lo ha intentado Izmar, la auxiliar viguesa de logística de fábrica (monta contenedores de transporte de piezas), aunque todavía no ha consolidado su proyecto.

PSA invertirá 557 millones de euros en la nueva instalación en el parque Atlantic Free Zone de Kenitra, a unos 50 kilómetros al norte de la capital, Rabat, para producir 200.000 coches al año, de modelos que todavía no han trascendido.

Al igual que ocurre con la automoción gallega implantada en el norte de Portugal, los proveedores que arriesgan en una inversión en Marruecos lo hacen incentivados por subvenciones fiscales, como la exención total del impuesto de sociedades o el apoyo financiero otorgado por el fondo Hasán II (para gastos de construcción y costes de equipos).

Además, y al igual que el vecino luso, Marruecos es consciente de su fuerza competitiva, con una mano de obra con un salario mínimo por debajo de los 210 euros mensuales.