Cadenas y franquicias entran en Galicia en busca del consumo que más crece de España

Manoli Sío Dopeso
m. sío dopeso REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

Oscar Vázquez

El comercio gallego lidera la recuperación de las ventas tras un lustro de estancamiento

07 sep 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

El gigante Inditex ha elegido A Coruña para instalar la tienda insignia del grupo. ¿Un mero gesto de patriotismo? Probablemente algo haya de eso. Pero nadie llega a la cima de la industria textil con sentimentalismos.

La apertura del establecimiento, el mayor del grupo en Galicia, es una decisión muy calculada, adoptada tras analizar el comportamiento del mercado gallego que, ahora sí, se puede decir que ha despertado.

Lo confirman las estadísticas. La más reciente, de finales de agosto, arroja un crecimiento de las ventas del 3 % respecto al verano del 2015. Aunque no es este el dato más llamativo que constata el INE (Instituto Nacional de Estadística): la subida de la facturación en Galicia ha sido también un 3 % superior a la alcanzada en el conjunto de España en la campaña de verano.

Y esto se produce tras 6 meses consecutivos liderando el crecimiento del sector minorista por comunidades autónomas codo con codo nada menos que con Baleares.

Este escenario favorable al consumo explica que cadenas y franquicias (básicamente nacionales), hayan convertido a las principales ciudades gallegas en objetivos claros y estratégicos para su despliegue. 

Avalancha de cadenas

El desembarco de negocios está liderado por las nuevas firmas del retail, las más dinámicas en estos momentos, especialmente dentro del textil. La lista de enseñas y aperturas crece por momentos. Destaca la apuesta de Okeisy (moda femenina); la portuguesa Lion of Porches, Kilarny, con fuerte expansión en A Coruña y Santiago; la moda infantil de Trasluz, la lencería de Alma Bloom, la moda británica de Brave Soul, los snakers de Foot o Mars, la bisutería de Dayaday, los zapatos de Marypaz o el todo a 25 euros de Top Queens. Son las cadenas que más están creciendo. Tienen presencia en las mejores calles comerciales y son omnipresentes en los centros de más tirón, en sana convivencia con Inditex, Mango o Cortefiel, los verdaderos reyes del Monopoly comercial en Galicia. A esto hay que sumar el movimiento de inversiones que se están generando en el segmento de las grandes superficies. 

La comunidad cuenta con un total de 886.741 metros cuadrados dedicados a grandes áreas comerciales, y entre el 2015 y el presente ejercicio habrá ganado 80.000 metros cuadrados más, que elevan la oferta total de suelo en centros comerciales en un 10 %. 

Más margen para crecer

Fondos de inversión ya son dueños de los mayores centros comerciales, y el capital riesgo dominado por socios extranjeros está detrás de operaciones en la comunidad por valor de 560 millones de euros.

¿Qué está pasando en Galicia? ¿A qué se debe esta especie de bum del consumo que reflejan las estadísticas y la entrada de nuevas cadenas? El presidente de la Federación Galega de Comercio, José María Seijas confirma los buenos datos, pero recuerda el punto de partida. «Es necesario seguir incrementando la facturación para recuperarse de las bajadas de entre el 35 % y el 40 % que se produjeron en los peores años de la crisis». 

Es más fácil crecer desde abajo

«Hay una realidad de base: es más fácil crecer cuando partes de más abajo», afirma Santiago Lago, director del Foro Económico de Galicia. Para el economista, es evidente la mejoría del sector en la comunidad y da una explicación: «El consumo estaba muy deprimido en Galicia porque los índices de confianza estaban por debajo de la media española. Esa percepción ha mejorado y se refleja en las ventas», afirma.

En la misma línea, el economista Venancio Salcines opina que el repunte que han experimentado las ventas tiene su explicación en unos años de gran retroceso: «Es un crecimiento porcentual y nosotros arrancamos de un punto más bajo que otras comunidades. Al partir de un listón más bajo, el incremento es más llamativo».