Volkswagen frena la producción del Golf y el Passat toda una semana

patricia baelo BERLÍN / E. LA VOZ

ECONOMÍA

HENDRIK SCHMIDT | Efe

El consorcio reducirá la jornada laboral a 28.000 empleados por el litigio que mantiene con dos proveedores

23 ago 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Los empleados de Volkswagen amanecían ayer con malas noticias: el consorcio detendrá la producción de sus modelos Golf y Passat en seis centrales alemanas, debido al contencioso que mantiene con sus proveedores. Por ello, el primer fabricante automovilístico europeo ha decidido reducir la jornada laboral a 27.700 de sus trabajadores hasta finales de este mes de agosto. La medida afectará a las plantas de Emden, Zwickau, Kassel, Salzgitter, y especialmente a las de Braunschweig, donde se recortará la jornada a 7.500 empleados, y Wolfsburgo, en la que VW tiene su sede y donde unos 10.000 miembros de la plantilla se verán implicados.

Ya hace dos días la empresa informó de que se veía obligada a frenar su producción de vehículos como consecuencia de la falta de determinados componentes para la caja de cambios y elementos imprescindibles para el revestimiento de los asientos. Y es que el consorcio mantiene un largo y tedioso litigio con dos de sus empresas abastecedoras, Car Trim y Es Automobil, que exigen a VW el pago de una indemnización de 58 millones de euros por haber rescindido varios contratos «sin aviso previo ni motivo» a raíz de las pérdidas que le ha originado el escándalo de manipulación de emisiones contaminantes, que salió a la luz el pasado septiembre. «El parón de los suministros es en defensa propia, lo hacemos para defender el futuro de nuestros propios trabajadores», insisten sus representantes.

Sin embargo, la versión del fabricante automovilístico es bien distinta. «A nuestro modo de ver, la responsabilidad es claramente de los suministradores. ¿O piensa usted que nosotros, como comité de empresa, no preguntamos quién es el culpable de que nuestros compañeros se queden en casa?», declaró en una entrevista con el diario Bild el presidente del comité de empresa, Bernd Osterloch.

Entretanto, los analistas calculan que solo dejar de fabricar el Golf una semana va a costarle hasta 100 millones de euros brutos a VW, que necesita más ahorros que nunca para afrontar las multas millonarias que se le vienen encima en Europa y Estados Unidos por el dieselgate.

¿Impacto en Galicia?

El frenazo en las seis fábricas alemanas podría tener también repercusiones en Galicia, donde hay unos 30 proveedores de la automoción que trabajan directamente para el constructor alemán, para varios de sus modelos. Está por ver si un efecto en cadena podría llegar a esas empresas, asentadas principalmente alrededor de Vigo.

También podría repercutir en la red de concesionarios, por retrasos en las entregas.