«Vamos al trabajo, sin cobrar y sin nada que hacer»

Cláudia Morán A CORUÑA / LA VOZ

ECONOMÍA

Empleados coruñeses de una firma de telemárketing de León afirman que están «secuestrados»

15 jun 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

«Nos encontramos prisioneros, secuestrados por la empresa. Tenemos que ir al centro de trabajo, pero no podemos trabajar ni nos están pagando». Esta es la situación de los 55 trabajadores de la compañía de telemárketing ALN en A Coruña, según relata la presidenta del comité de empresa, Pilar Pérez. Todo empezó el pasado mes de enero, cuando la entidad «empezó a retrasarse en los pagos y a incumplir las condiciones salariales», hasta que en marzo entró en concurso de acreedores y «comenzó a demorarse todavía más, hasta no pagar». Hibu, el cliente para el que operaban a través de ALN -y para el que llevan trabajando durante 16 años a través de varias subcontratas-, decidió entonces romper el contrato, pero la compañía de telemárketing «no lo aceptó», cuenta Pérez. «Hibu cortó los sistemas informáticos, por lo que no tenemos clientes», señala, de manera que la plantilla se ve obligada a «ir al centro de trabajo, pero sin poder trabajar y sin cobrar».

Pero los inconvenientes para los trabajadores no se quedaron ahí. Según explica la plantilla, una nueva compañía, Konecta, con sede en Bergondo, ganó el concurso para gestionar la campaña de Hibu y estaría «dispuesta a contratar a toda la plantilla». El problema, siempre según Pilar Pérez, es que «hasta que ALN rescinda los contratos, Konecta no se hace cargo de la antigüedad de los trabajadores».

La plantilla ha recurrido a inspección de trabajo con el fin de que se les facilite un acta de falta de ocupación efectiva para poder solicitar la restricción de contrato en el juzgado, ya que su intención es «mantener los puestos de trabajo», afirma Pérez.

No es el primer caso

Pero no es la primera vez que el grupo ALN, que tiene su sede central en León, sale a la luz por sus conflictos laborales. El máximo accionista de la entidad, José Ángel Crego, renunció en marzo a la presidencia de la patronal Círculo Empresarial Leonés tras desvelarse que los casi 400 trabajadores de la filial de ALN en Barcelona llevaban meses sin cobrar. Crego renunció, asimismo, a liderar la candidatura de Ciudadanos a la alcaldía de León en marzo del año pasado después de que el partido se desmarcase de unas declaraciones en las que el empresario sugería que los trabajadores indemnizasen a las empresas en caso de despido.

«De alguna manera, Crego está practicando lo que predicaba», valora Pilar Pérez, quien espera que la situación se resuelva «lo antes posible». Añade que la plantilla de Barcelona está «con permiso retribuido en casa» gracias a la mediación de inspección de trabajo, por lo que «por lo menos, no tienen que ir a trabajar».