Aznar avisa a Rajoy de los peligros de un exceso de deuda pública

Enrique Clemente Navarro
Enrique Clemente MADRID / LA VOZ

ECONOMÍA

El expresidente del Gobierno considera que es un «grave error» relajar la corrección del déficit

21 may 2016 . Actualizado a las 01:28 h.

Se ha convertido ya en un clásico. Cada cierto tiempo y sin importarle que sea poco antes de unas elecciones, José María Aznar irrumpe en la escena pública para lanzar sus dardos envenenados contra Mariano Rajoy. «Cualquier país cuya deuda supera el 100 % de su PIB se adentra en una espiral de problemas de todo orden de la que es extremadamente difícil salir», aseguró ayer. En la primera ocasión que tuvo, tras conocerse dos días antes que la deuda de las administraciones públicas había superado por primera vez esa barrera psicológica, Aznar se lo echó en cara al presidente del Gobierno en funciones. Solo fue uno más de los numerosos reproches que le dirigió ayer en su intervención ante el Foro de Economistas, en la que volvió a enmendar la plana a Rajoy.

No se quedó allí el expresidente, que propinó a Rajoy otro varapalo por el incumplimiento del déficit al señalar que «relajar» su corrección es un «grave error». Precisamente lo que ha hecho su sucesor, pedir más flexibilidad a Bruselas, una vez que España no ha podido cumplir en el 2015 el objetivo de déficit fijado, ya que se situó en el 5,1 % del PIB, nueve décimas por encima, lo que podría acarrear a España una multa de más de 2.000 millones de euros.

Para el presidente de la fundación Faes, «aceptar la oposición entre rigor fiscal y crecimiento es une error muy grave, económico y político». Añadió que «el déficit público no crea empleo, todos los empleos creados por el déficit y no por la reformas económicas se irán con el ciclo económico, pero el déficit no se irá». La conclusión de su argumentación fue otra pulla al que fuera su vicepresidente: «Hay que volver a tomar en serio la disciplina y las reformas».

El expresidente apostó por la «reducción del gasto público», sin «confiar simplemente en el crecimiento de los ingresos públicos cíclicos» para cumplir los objetivos de déficit de Bruselas, que acaba de dar a España un año más para cumplir con el 3 % A su juicio, «España debe mantener e incluso acelerar el proceso de consolidación fiscal».

Aznar criticó el «parón reformista» del Gobierno durante «demasiado tiempo» y dijo que mantenerlo sería un «error histórico». «No hacer ahora nada dejaría sin efecto los esfuerzos que sí se han hecho en los últimos años», advirtió. Además, atribuyó lo que definió como «buen momento» de la economía española al «ciclo económico favorable potenciado por fuertes vientos de cola». Y nueva reconvención a Rajoy, al que nunca citó por su nombre: «Hay que hacer reformas profundas, y nadie puede sustituir la responsabilidad de los Gobiernos nacionales». Se trata, en su opinión, de «hacer política persuasivamente, hacerla mejor que tu adversario».   

Según Aznar, el momento es idóneo para poner en marcha lo que ya hicieron sus gobiernos entre 1996-2004, lo que llamó «un proceso de consolidación fiscal expansiva», de sustitución de gasto público por gasto e inversión privada. Dicho de otro modo, el modelo que debe seguir Rajoy y del que se ha desviado es el suyo.

La vicepresidenta del Gobierno en funciones, Soraya Sáenz de Santamaría, respondió a la nueva andanada de Aznar argumentando que es preciso compatibilizar el ajuste del déficit con el crecimiento económico y el empleo. Sobre el aumento de la deuda, señaló que esta ya existía en anteriores legislaturas, «solo que no se había aflorado», lo que ha sucedido ahora con el plan de pago a proveedores..