Diego Vázquez Reino: «Estamos listos para asumir la mitad de los parados gallegos»

Francisco Espiñeira Fandiño
F. Espiñeira A CORUÑA / LA VOZ

ECONOMÍA

MARCOS MÍGUEZ

El presidente de Apecco considera que «cada inversión aporta un retorno del 50 % en impuestos y de más del doble en valor generado»

10 abr 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Diego Vázquez Reino (A Coruña, 1974) lleva apenas unos meses como presidente de la Asociación Provincial de Empresarios de la Construcción de A Coruña (Apecco), pero no es un recién llegado al sector. Acumula 18 años en distintos puestos de su empresa familiar, Vázquez y Reino, donde ocupa la gerencia. «Somos una compañía de cuarta generación», le gusta decir a este amante del baloncesto, casado, padre de una hija y feroz defensor del prestigio de un sector que considera injustamente denostado.

-¿Cuál es su balance del 2015?

-Estamos otra vez en los peores números del sector desde antes del estallido de la crisis. La incertidumbre electoral y las restricciones económicas de algunas Administraciones nos han colocado al borde del abismo y es muy difícil conseguir que se reactive el mercado en estas condiciones. -Le veo poco optimista de cara al 2016.

-Es que hay pocos motivos para serlo. Esa incertidumbre política de la que hablaba se mantendrá. Y el sector de la obra pública está injustamente marcado con un carácter negativo.

-¿Por qué?

-Eso quisiéramos saber nosotros también. Sería conveniente que algunos políticos recordarán que el cincuenta por ciento del dinero destinado a obra pública les retorna a las distintas Administraciones vía impuestos. Y que el valor generado por esas actuaciones en infraestructuras y equipamientos genera directamente el doble del valor invertido. Por no hablar del empleo.

-Según sus cifras, han perdido un tercio de los empleados desde el 2011.

-Está perfectamente demostrado que cada millón de euros invertido genera 18 empleos directos y 45 indirectos. Le puedo asegurar que, si las Administraciones aprovechan para invertir de forma correcta el dinero que puede empezar a haber en esta fase de recuperación económica, nuestro sector está en condiciones de asumir directamente la mitad de los 235.000 parados que hay en estos momentos en Galicia.

-¿Qué opina cuando oye que las obras públicas son caras?

-Yo tengo poco que decir. Soy parte interesada. Me remito a las explicaciones de la Unión Europea invitando a los Gobiernos a recuperar la inversión para reactivar sus economías. Creo que su visión global aporta más que cualquier cosa que diga yo. Pero no parece de recibo presumir de la apuesta por suprimir la obra pública, cuando es clave para generar empleo y actividad económica, según acreditan todos los expertos.

-¿A qué amenazas se enfrentan en los próximos meses?

-Además de la incertidumbre electoral, yo diría que a esa fórmula que se ha instalado de premiar la oferta económica en lugar de las calidades técnicas. Los pliegos se han convertido en subastas y muchas empresas con problemas buscan hacer cartera aún a costa de dejar sin finalizar los trabajos comprometidos. Y en eso es en lo que debería estar especialmente vigilante la administración.

-¿Hacia dónde debe ir el sector de la construcción?

-Cada empresa busca su camino. Pero la sequía de las Administraciones ha de incentivar la iniciativa privada de forma considerable. La rehabilitación de inmuebles se ha convertido en una alternativa real ya. Y la búsqueda de nuevos nichos de mercado, tanto en España como en el extranjero también nos puede ayudar a superar el bajón inversor.

DIEGO VÁZQUEZ REINO presidente de apecco