Queman tres cisternas, dos con nata para Francia, ante una planta láctea en Lugo

Dolores Cela Castro
Dolores Cela LUGO / LA VOZ

ECONOMÍA

ALBERTO LÓPEZ

Es el tercer sabotaje esta semana, después de que la Plataforma en Defensa do Lácteo decidiera perseguir la leche foránea

09 abr 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

La quema de tres cisternas de la empresa Ríos Sangiao, de Oroso (A Coruña) -dos de ellas cargadas con nata con destino a Francia- en el aparcamiento próximo a Logística Alimentaria, la antigua planta de Pascual, en Outeiro de Rei está caldeando el ambiente en el sector lácteo. Al sabotaje del viernes se une a otro sufrido en la noche anterior por un remolque perteneciente a un autónomo, en este caso de A Pastoriza, que trabaja para Reny Picot, al que le quemaron las ruedas.

En algunos círculos temen que la situación se haya vuelto incontrolable y que puedan aparecer más casos similares en Galicia, coincidiendo con una situación de todavía más incertidumbre. El sector se siente amenazado por una posible bajada de precios y está preocupado ante la posibilidad de que empiece a quedar leche sin recoger en el campo.

División sindical

Los últimos sabotajes coinciden en una planta ante la que, un día antes, se concentró un grupo de ganaderos para protestar por la entrada de leche foránea en Galicia, con destino a las industrias que operan en la comunidad. Durante esa jornada quedaron patentes las diferencias entre las organizaciones integrantes de la Plataforma en Defensa do Sector Lácteo. Tras dos asambleas y significativas ausencias, los asistentes no fueron capaces de llegar a un acuerdo para planificar las siguientes movilizaciones. Finalmente, la plataforma informó de que se habían creado cinco grupos que tenían como misión recorrer Galicia para localizar cisternas cargadas con leche foránea. El viernes, la plataforma como tal no había emitido ningún comunicado condenando el vandalismo.

Intereses ocultos

El gerente de Logística Alimentaria, Antonio Jurado, cuya fábrica estuvo cercada por un grupo de ganaderos el miércoles, aseguró que no entiende el trato que dispensan las organizaciones agrarias a una empresa «de las que menos recogen» en el sector. Según dijo, en la planta de Outeiro de Rei no entra «ni un solo litro» de leche de Francia ni Portugal. «Puede que se deba a otras cosas, como intereses ocultos que no acierto a entender», añadió.

Dos de las tres cisternas siniestradas -según todos los indicios el fuego fue provocado- estaban cargadas con 25.000 litros de nata cada una. En total están valoradas en más de 200.000 euros.

Logística Alimentaria, que asegura que las industrias también están afectadas por la crisis de precios, instó a las autoridades a que actúen ante lo que denominan «una sucesión de delitos de la misma factura». En la nota difundida señala que le resulta incomprensible que no se haya «procedido a la identificación y detención de los responsables». Para esta empresa, quienes realizan estos actos «no son ganaderos afectados por la crisis del sector lácteo, sino delincuentes. Y como tales han de ser tratados».

Investigación

La Guardia Civil está investigando los sabotajes. Cuenta con las grabaciones de las cámaras de Logística Alimentaria, que registraron de madrugada un fogonazo. También se habla de la presencia de dos coches en la zona poco antes de la quema.