Telefónica ganó 2.745 millones el año pasado, un 8,5 % menos

J. A. B. MADRID / COLPISA

ECONOMÍA

JUAN MEDINA | REUTERS

La operadora provisionó 2.600 para su último ajuste de plantilla, si bien elevó un 4% sus ingresos

27 feb 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Telefónica ha preferido recortar su abultada cifra de beneficios en un 2015 de recuperación en su negocio para asegurarse un ahorro de costes importante en los próximos años. Hablamos del plan de bajas incentivadas pactado con los sindicatos en el marco de su nuevo convenio, vigente hasta el 2017.

El grupo que preside César Alierta apartó en el último trimestre 2.602 millones de euros para la cobertura de dicho plan -aún faltarán casi otros 300 en los próximos meses-, que junto a otros conceptos elevaron las provisiones a 3.122 millones. Eso hizo resentirse sobremanera sus cuentas, que pasaron de un beneficio de 303 millones en el último cuarto del 2014 a perder 1.832 millones.

En el conjunto del ejercicio, el beneficio de la operadora se redujo un 8,5 % hasta los 2.745 millones. No obstante, sin considerar el plan y otros impactos no recurrentes, su beneficio habría alcanzado los 5.787 millones, lo que supone un auge de un más que apreciable 30 %.

Pese a este coste inicial, Telefónica sostiene que su plan de bajas para mayores de 53 años, que podrán irse a casa con el 68 % del sueldo, tendrá una «generación de caja positiva» desde este mismo año, aunque el ahorro en gastos no llegará hasta el 2017 con una media de 370 millones anuales.

Repunta el mercado español

Respecto a los ingresos, alcanzó los 47.219 millones, aunque también aquí hay doble lectura. En términos orgánicos subió un 4 %, aunque la compañía reportó un aumento del 8,7 % una vez corregida la cifra del año pasado tras descontar los ingresos de su filial británica O2 y aislar el efecto de la devaluación en Venezuela. Sin esa enmienda contable, las ventas caerían un 6,2 %.

Por divisiones, dos de cada tres euros ingresados en el 2015 por Telefónica vinieron de España, Alemania y Brasil -Latinoamérica aportó el 30 % de sus ingresos-. En el mercado nacional, el grupo consolidó la mejora de ingresos con un repunte del 3,2 % y dijo adiós a siete años de caídas casi consecutivas. Pero sus cuentas no parecen haber convencido a los inversores -su cotización bajó casi un 3,2 %-, aunque Alierta cree que la acción está «tirada» y «garantizó» un dividendo de al menos 0,75 euros para los próximos cinco o diez años. El presidente redujo su sueldo un 3 % el año pasado, hasta los 6,7 millones, si bien sumado su bonus en acciones crecería un 29 % hasta rozar los 8,7 millones.